La paz sin participación política

Autor: Juan Manuel Galán
23 diciembre de 2017 - 12:07 AM

Con el país dividido, polarizado y con los partidos políticos tradicionales fragmentados, los acuerdos de paz tienen muy pocas garantías para cumplirse

Tensa calma es la que sentimos los colombianos ad portas de terminar el 2017. La implementación de los acuerdos de paz con las Farc, ha dejado un sabor agridulce. Luego de un año de vigencia del procedimiento legislativo especial Fast Track, el balance que encontramos es que de 67 iniciativas legislativas que necesitaban trámite, el Gobierno Nacional solo presentó 24 y el Congreso aprobó solo cinco actos legislativos y cinco leyes ordinarias, quedando pendientes temas claves para la paz.

Del paquete de proyectos necesarios para cumplir el acuerdo de paz, solo se abarcó y a medias, lo relacionado con la participación política y la reintegración de miembros de las Farc, la creación de la Jurisdicción Especial de Paz (JEP), el blindaje jurídico de los acuerdos y la modificación al Sistema General de Regalías. Así, temas fundamentales para las víctimas como los proyectos relacionados con la política de desarrollo agrario integral y la solución al problema de las drogas ilícitas, quedaron pendientes y sin certeza de cuál será el paso a seguir para su aprobación.

Lea también: Despertar después del Fast Track

El Gobierno no da luces de cuál será el procedimiento para la ejecución de los proyectos pendientes. Ni que decir de los proyectos sobre espacios de toma de decisiones que merecían las víctimas. Con la más cínica actitud, este Congreso les negó absurdamente la posibilidad de participar en política a través de las circunscripciones transitorias de paz y hoy, ellas están casi peor que al comienzo, sin reparación y sin ser tenidas en cuenta en la elaboración de leyes y políticas públicas.

Por su parte, los casi 5.000 exguerrilleros que se encuentran en los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación (antes Zonas Veredales Transitorias de Normalización) están en medio de la nada. No tienen definida su situación jurídica (deberán esperar a que la JEP entre en funcionamiento), y tampoco cuentan con apoyo económico para sus proyectos productivos (porque no se ha aprobado ningún proyecto que reglamente y viabilice la asignación presupuestal).

Vea también: Las víctimas sin espacio

Es decir, les estamos proponiendo que se reincorporen a la vida civil, pero sin brindarles las garantías necesarias para lograrlo. Así las cosas, nos encontramos ante un panorama poco alentador, de cara a un nuevo año electoral. Con el país dividido, polarizado y con los partidos políticos tradicionales fragmentados, los acuerdos de paz tienen muy pocas garantías para cumplirse y permitir la reinserción de los miembros de las Farc y la reparación de las más de 8 millones de víctimas. Esperemos que el 2018 traiga nuevos y mejores vientos, para consolidar esta paz tan anhelada.

Compartir Imprimir

Comentarios:

augusto
augusto
2017-12-23 08:01:58
Basta con ver el comportamiento de los delfines para saber como está de mal la política en Colombia. Si eso es con delfines que debieron heredar de sus padres una justa política, que esperar de un pueblo que se mueve por engaño de los corruptos.

Destacados

Carlos Vives
Columnistas /

Para adelante y para atrás

El Mundo inaugura
Columnistas /

EL MUNDO fue la casa de la cultura de Medellín

Mabel Torres
Columnistas /

Firmas y responsabilidad

Guillermo Gaviria Echeverri
Columnistas /

La desaparición de EL MUNDO

Fundamundo
Columnistas /

Mi último “Vestigium”

Artículos relacionados

Justicia especial para las víctimas
Columnistas

Justicia especial para las víctimas

Para cambiar las armas por las palabras, lo primero que tenemos que hacer es encararnos, decirnos la verdad y oírnos.

Lo más leído

1
Cazamentiras /

Nicolás Maduro, ¿colombiano?

Recientemente, usuarios en las redes sociales reavivaron la polémica en torno a la nacionalidad del...
2
Columnistas /

¿Glorieta, rompoi o romboi?

@ortografiajuanv explica las interrelaciones de culturas y la formación de nuevas palabras
3
Columnistas /

¿Dulcecito o dulcesito?

El elemento que agregamos al final de una palabra para cambiar su sentido se llama sufijo… Este sufijo...
4
Pensándolo Bien /

Pensándolo bien 2 de febrero

El gobierno del doctor Duque no puede aceptar ninguna presión para legitimar a un dictador que usurpa...
5
Columnistas /

¿Migrar o emigrar? ¿E inmigrar qué?

Migrar, emigrar e inmigrar hablan de la misma realidad, pero no por ello son sinónimos. Las diferencias...
6
Urabá /

Urabá, una economía del banano y el turismo

Urabá es una zona estratégica para la agroindustria de Antioquia, siendo el plátano y el banano sus...