Esta contaminación virtual se debe principalmente a la propaganda y a los repetidos anuncios y promesas de las autoridades.
Es evidente que muchas regiones del país están sometidas a procesos de contaminación graves. Son muchas las causas que van desde la utilización de combustibles fósiles hasta los desaforados y descontrolados procesos de urbanización.
Se trata entonces de una contaminación real o sea física.
Pero también existe una contaminación virtual, que tiene gran influencia en la mente de los habitantes de la región. Aquí debe destacarse la contaminación debida a las “cortinas de humo” que suelen emitir, en gran escala, las entidades afectas al régimen, para lavarle el cerebro a la comunidad, y desviar la atención sobre los desafueros de los mandatarios. A nivel nacional, además del “como nunca antes” del Primer mandatario, y las casas gratis del “colega ingeniero” Vargas, debe destacarse la excelente labor, emitiendo permanentes “cortinas de humo”, de la Fiscalía General de la Nación para tratar de desviar la atención sobre “los presuntos devaneos” del Primer Mandatario. Es claro que en primera instancia se trata, ni más ni menos, del “escándalo” Oderbrecht. Prácticamente, en forma diaria, organiza ruedas de prensa para pasar listas de presuntos comprometidos y/o detenidos por cuanto delito describe la ley, y cabe preguntar: si de esas detenciones colectivas, a la larga, queda algo. Ha llegado hasta inventarse un presunto complot contra una funcionaria local. A propósito de Oderbrecht está circulando la noticia de los grandes contratos que le han adjudicado a la firma peruana Graña y Montero, que según ha trascendido es subsidiaria de Oderbrecht. Y entonces: ¿Qué pasa con las firmas locales?
Es claro que hay otras entidades como la Contraloría que emite una gran “cortina de humo” el mismo día que se aprueba la “tal” Justicia Especial para la Paz, para desviar la atención, presentando una lista de presuntos comprometidos en el escándalo Reficar. Se destaca, (¿cuando no?), el actual Ministro de Hacienda, el “Dragacolero”, y no es descabellado pensar que no va a pasar nada.
Esta contaminación virtual se debe principalmente a la propaganda y a los repetidos anuncios y promesas de las autoridades.
En este orden de ideas vale la pena recordar que hace 3 años en un diario local se informaba: “$26.2 billones de autopistas ya son intocables: Santos” y se informaba también: “Los recursos para ejecutar proyectos viales que unen a Antioquia con el país ya fueron aprobados y ni el Congreso podrá reversar la decisión”. Acompañaba esta noticia una fotografía del presidente con la camisa de la selección Colombia y marcado en su frente con la Cruz de la Santa Ceniza. Vale la pena revisar y analizar en que van estas promesas, principalmente, evaluando el hecho que en algunos tramos, se cambia la doble calzada por calzada simple, con tercer carril en pendientes.
En el ámbito local fueron múltiples las emisiones de “cortinas de humo”, como los anuncios de: “Antioquia la más educada” y “Aquí no se pierde un peso” de la administración departamental anterior con resultados muy cuestionables y cuestionados.
A nivel del Municipio, la “innovadora” ciudad plena de premios y distinciones, falló en el mantenimiento de las entidades educativas como se manifestó en la prensa local bajo los titulares “Lanzan SOS por fallas locativas de colegios” y “Los daños de algunos de ellos ponen en riesgo la integridad de los estudiantes y profesores”. Y respecto a los procesos de contratación la “Cámara Colombiana de la infraestructura reveló que “falta pluralidad en contratos de la Alcaldía de Medellín y el Área Metropolitana”. Se trata del abuso de los Convenios Interadministrativos dizque “buscando agilidad”.
En cuanto al desarrollo urbano, se informa que, un año después de su aprobación: “Faltan ajustes para formalizar el Plan de ordenamiento Urbano. POT”. ¡Vaya, vaya con esa planeación!
Para terminar se menciona el proyecto bandera de la administración local anterior: Los Parques del Río, para llamar la atención sobre el desarrollo de la segunda etapa principalmente en lo relacionado con los sistemas masivos de transporte. Según ha trascendido: “¡Están en pañales!”.