Entre punk, rock y metal abrió uno de los festivales de música más importantes de Medellín, Altavoz.
Dos escenarios, cientos de jóvenes, buena música y un ambiente muy amiguero, así se vivió el primer día de Altavoz Fest. La responsabilidad cayó sobre Yarumo, la primera banda en tocar en esta octava versión, la cual estuvo encargada de levantar el ánimo de los primeros asistentes al Estadio Cincuentenario.
Poco a poco se fue llenando el lugar y la música sonó cada vez más fuerte. Eran casi las 2:00 p.m. cuando Adrián Música puso su toque independiente que luego le dio entrada al estribillo de Electric Sasquatc, agrupación que propuso el primer pogo del día.
Así, entre canción y canción la emoción de los asistentes por ver a sus bandas favoritas no se ocultó. Tal fue el caso de Federico Aguirre, quien llegó de Bogotá para escuchar a Agresores, banda local de punk. Mañana continúa la programación con el evento especial dedicado a Elkin de Kraken.