En un comunicado, Almagro expresó su apoyo pleno a esta propuesta que le enviaron en una carta los presidentes de la Comisión y la Corte y que busca acabar con las deficiencias financieras crónicas de ambos órganos.

"La propuesta conjunta busca proporcionar sostenibilidad a medio y largo plazo y asegurar que la Comisión y la Corte cumplan sus mandatos en tiempo y manera adecuados, incrementando las contribuciones de los Estados miembros y dependiendo en menor medida de las contribuciones de los observadores permanentes y otros donantes", explicó el secretario.

Almagro argumentó que esta iniciativa permitiría que ambos órganos celebraran más sesiones, la creación de la Relatoría Especial para los Derechos Económicos y Sociales y, además, llevaría a incrementar el número de casos resueltos por la Comisión, con sede en Washington, y la Corte, con sede en San José (Costa Rica).

El excanciller uruguayo considera que los 34 Estados miembros "tienen la responsabilidad de asegurar que el sistema interamericano de derechos humanos esté adecuadamente financiado para cumplir con sus responsabilidades y espera que acepten la propuesta de la Comisión y la Corte".

Actualmente, el reparto presupuestario es de 4,9 millones para la Cidh y 2,6 para la CorteIDH, el 6% y el 3% del fondo regular de la OEA, respectivamente, aunque ambas sobreviven gracias a las aportaciones voluntarias, y por tanto inciertas, que recaban entre países de dentro y fuera del sistema y varias entidades.

La decisión sobre el presupuesto para el año 2017 será adoptada por los 34 Estados miembros en la Asamblea General extraordinaria que se realizará el 31 de octubre próximo.

La Cidh dio la semana pasada por superada la peor crisis financiera de su historia, pero pidió que se aumente su presupuesto anual para evitar una situación similar el próximo año.