Lograr marcar el nombre en la historia es un reto que toma tiempo y, sobre todo, que no es tan fácil. Muchos son los deportistas que no logran dejar huella en sus disciplinas, como hay otros que desde el comienzo logran dejar marcado su nombre para la historia del deporte colombiano, como lo hizo el antioqueño Javier Zapata Cuartas, quien desde hace muchos años es reconocido por todos los fanáticos de las bielas y se convirtió en toda una leyenda del Bike Trial en el país.

A sus 44 años, Javier recordó en diálogo con EL MUNDO todo lo que ha sido su carrera deportiva, sus inicios, sus momentos buenos y malos, sus triunfos y todo lo que le ha dejado su gran habilidad para escalar sobre cualquier roca, muro, escalera, entre otras.

Inicios deportivos

Desde 1996 el nacido el 15 de enero de 1973 en la Capital de la Montaña está dedicado al Bike Trial, pero sus inicios fueron en el BMX, donde comenzó a competir desde 1983 y lo hizo hasta el Mundial realizado en Melgar, Tolima, en el año 1995. “Desde los 9 años estoy sobre la bicicleta. Todo empezó porque me crie en el barrio Calasanz, uno de los barrios donde se inició el bicicross, que en esa época se llamaba ciclocross. En este barrio estaba ubicada la llamada Pista de Vida, donde entrenaban los pioneros de esta disciplina, Enoc Restrepo, Óscar Correa y los hermanos Arango, a quienes veía montar permanentemente, entonces enloquecí a mi padre para que me regalara una bicicleta de BMX. Inicialmente me dio una que no era tan buena y luego ahorraron en mi casa los $17.000 que costó la que era mejor y me la regalaron, pero con el compromiso de ir bien en el colegio y así fue, hice lo mejor posible e inicié a competir en BMX y fui selección Colombia, campeón nacional, departamental, continental, panamericano, estuve en doce mundiales y en 1995 sentí que ya había cumplido un ciclo”.

Javier recuerda que en ese año (1995) “me dieron una bicicleta de Trial para que la ayudara a promocionar, porque era algo nuevo en el país. Tuve la oportunidad de ser el pionero del Trial en Colombia. Un señor en Bogotá, que era amigo desde el BMX y que tenía una distribuidora, me dijo que iba a traer unas bicicletas de un deporte llamado bicitrial y que acá no se conocía, acá hacíamos un Trial muy rudimentario, en unas bicicletas de BMX. Me dio una bicicleta, la empezamos a promocionar, cuando eso el internet estaba apenas surgiendo y viendo videos en VHS y montando me empecé a engomar con este deporte”.

El aprendizaje fue “muy autodidacta. Viendo videos fue que aprendí. Viendo a los pioneros de esta disciplina y empecé a mirar y a practicar”.

Grandes oportunidades en un deporte de paciencia

A Javier lo enamoró de esta disciplina el hecho de que “le vi muchas posibilidades comerciales, era más espectáculo, que lo podía practicar en espacios muy pequeños. No había muchas competencias pero me gustaron mucho los shows. Me engomé y vi que lo podía hacer a la par con mi carrera de comunicador social, entonces tomé la decisión de dedicarme completamente al tema del Trial”.

Para este deportista, del equipo extremo del GW-Shimano, lo más difícil en la práctica de este deporte es “aprender a tener muy buen equilibrio, eso es fundamental. Cuando uno aprende a quedarse quieto en la bicicleta, sin moverse, aprende después a saltar en la rueda trasera, luego a mover la delantera, pero lo más importante es tener equilibrio. Además, este es un deporte que requiere de mucha paciencia, porque es mucho ensayo-error, entonces de pronto por eso no es tan masivo dentro de las modalidades del ciclismo, porque si no se tienen las bases mínimas, va a ser muy difícil practicarlo. Creo que de todas las modalidades es la que requiere más habilidad y más destreza técnica”.

La preparación y el entrenamiento para cualquier presentación requieren de tiempo y cuidado, pues debe estar en la mejor forma para evitar posibles lesiones. “En el Trial se requiere mucho la parte física, es fundamental porque si se tiene una buena base física de fortalecimiento se facilitan las cosas y eso se traslada después a la bicicleta, pero es fundamental el trabajo sobre la bicicleta, el trabajo específico de ensayar y equivocarse hasta hacerlo bien”, afirmó.

Recuerdos buenos y malos

En los más de 20 años que lleva dedicado a esta actividad extrema, el comunicador social aseguró que todo lo que quiso hacer y en todas las partes en las que quiso montarse lo hizo. “Ahora hay gente más joven que pueden hacer algunos trucos, suben más alto, son más arriesgados, hay cosas muy precisas de las que me cuido un poco y no arriesgo más de lo necesario, pero lo hice todo. Lo más bonito es que tengo 44 años, soy un súper veterano del Bike Trial y todos los días aprendo cosas nuevas, por eso no me aburro ni se me hace monótono, porque todos los días es un reto nuevo”.

Hay dos momentos en la historia deportiva de Javier que lo dejaron marcado, uno bueno y uno malo. “El buen momento que recuerdo es cuando subí el edificio Coltejer, porque eso fue lo que me catapultó, dio a conocer el deporte y donde vi que podía vivir de montar en una bicicleta. El momento más duro fue en 2014 cuando se me reventó la cadena de la bicicleta y tuve lesión de ligamento cruzado anterior, fue un momento muy difícil, pero fue como un aprendizaje, porque tratando de superar ese reto llegaron a mi vida cosas muy positivas”, expresó el deportista que aparte de las lesiones de clavícula, golpes y muchas fracturas en el BMX nunca ha sufrido otra lesión tan delicada como la de la rodilla.

De los importantes y destacados títulos obtenidos en su carrera, confesó que el Guinness Récord que consiguió en el edificio Coltejer es de los que nunca olvida, “después de eso empecé a superar ese récord. Tengo cinco Guinness y tengo otros eventos significativos, que no han sido avalados por Guinness, pero han sido marcas importantes mundiales, como subir la Piedra de El Peñol, que por la dificultad de las escaleras es más difícil que los cinco Guineess juntos, el Cerro Pan de Azúcar, un cerro en Guadalajara, México, y también hice un salto sobre 23 niños sin ningún tipo de rampa”.

Complementando la vida deportiva

Este experimentado deportista ha logrado unificar sus profesiones y sacarles provecho. Javier resaltó que tuvo “una escuela privada durante mucho tiempo en la Unidad Deportiva de Belén, después le di una asesoría al Inder Medellín y montaron una escuela gratuita. En este momento no tengo la escuela y quiero retomarla, pero más personalizada”.

Además del deporte, Javier también dicta conferencias corporativas, llamada “El Cielo es el Límite”, dedicada a enseñarle a las personas que no hay que ponerse límites, eso son cosas mentales, “motivar a la gente a no tener límites en nada. Es basada en valores y lo que hago es contar mi historia de vida como ciclista profesional y comparar lo que la gente hace en su día a día con lo que yo hago sobre mi bicicleta”, explicó el Comunicador Social de la UPB.

Zapata tiene un fiel seguidor, quien lo acompaña en muchas partes de su trabajo y a infinidad de lugares. Su hijo Matías sigue sus pasos y a sus cortos 6 años es otro apasionado por la bicicleta. “A él le gusta mucho, lo que sabe se lo he ido enseñando de una manera lúdica y si él quiere seguirlo haciendo lo voy a apoyar. Por ahora le enseño habilidades básicas para que vaya aprendiendo. Cuando tengo la oportunidad lo llevo a los eventos, para él esto es un juego”.

Otros intentos pero siempre en torno a la bicicleta

No sólo ha probado con el BMX y el Bike Trial, aparte de estos el buen amigo y fiel admirador de la bicicrosista Mariana Pajón también se probó en el MTB y en la ruta: “Alcancé a competir en ciclomontañismo, hice varios departamentales y nacionales, sino que el nivel de exigencia era muy alto y cuando empecé a correr la gente pensaba que porque tenía habilidad en la bicicleta podía competir en la categoría élite, al principio intenté y no me fue tan bien, entonces no me gustó. La ruta también la probé, pero nunca me decidí a tomar la decisión de dedicarme a la parte profesional”, agregó el deportista que ha sabido unir su profesión de comunicador con la deportiva y ha logrado buenos resultados”.

Indiscutiblemente la bicicleta es un elemento fundamental en la vida de Javier Zapata, para quien el Bike Trial “significa todo, porque tomé esa apuesta, que nos es fácil, de dedicarme profesionalmente a este deporte, poder vivir de él. La bicicleta es todo en mi vida, mi vida gira en torno a la bicicleta”.

Guinness Récords de Javier Zapata

Edificio Coltejer 

Ciudad: Medellín - Colombia.
Fecha: 6 de mayo de 1999.
Escaleras: 761 (38 pisos).
Tiempo: 23 minutos y 17 segundos.

Torre Colpatria

Ciudad: Bogotá - Colombia.
Fecha: 20 de mayo de 2000.
Escaleras: 943 (48 pisos).Tiempo: 43 minutos y 26 segundos.

Torre Parque Central

Ciudad: Caracas – Venezuela.
Fecha: 19 de junio de 2001.
Escaleras: 1.200 (55 pisos).
Tiempo: 1 hora y 5 minutos.

Torrey Major Skyscraper

Ciudad: México
Fecha: 16 Octubre 2003
1.318 pasos en bicicleta
Tiempo: 1 hora 30 minutos.

Torre Jin Mao Shanghái

Ciudad: Shanghái
Ascenso: 88 pisos, en 2008.
También lo hicieron Xavi Casas (Andorra) y Zhang jincheng (China).