Las fuerzas iraquíes se preparan para la inminente ofensiva contra el grupo terrorista Estado Islámico (Ei) en el oeste de la ciudad septentrional de Mosul, cuyo sector oriental, liberado, fue escenario de choques entre ambas partes en días pasados.
El comandante de las Fuerzas Especiales Antiterroristas, general Maan al-Saadi, declaró que las unidades castrenses esperan que las condiciones meteorológicas se estabilicen para iniciar la liberación de la zona occidental de la localidad, que se encuentra bajo control yihadista. Agregó que las operaciones militares durarán al menos siete días, a fin de que las fuerzas logren alcanzar la entrada de la ciudad, tal y como sucedió en la anterior fase en el este.
La fuente indicó que estaba previsto que las operaciones comenzaran el pasado sábado, pero las malas condiciones meteorológicas lo impidieron. Asimismo, señaló que el único obstáculo en esta contienda son los civiles, que se encuentran atrapados en la ciudad.
Por otra parte, la Comandancia de Operaciones de Liberación de Nínive, cuya capital es Mosul, informó en un comunicado de que en días pasados se derribaron 50 drones del Ei, en el este de la urbe.
En el mismo contexto, la seguridad del estado realizó campañas en los barrios de Al Karama y Al Quds en el sector oriental, gracias a la colaboración de sus habitantes, con el fin de buscar células durmientes del Ei.
Por otra parte, el presidente del concejo de la comarca de Al Hamdaniya, Feisal al Iskandar, explicó que estallaron violentos enfrentamientos esta madrugada entre fuerzas asirias cristianas y milicias de las brigadas Babilonia, que profesan la religión cristiana también, y una de las facciones de la Multitud Popular chií.
Detalló que los enfrentamientos duraron más de seis horas y causaron heridas a un efectivo de las fuerzas asirias y a cuatro combatientes de Babilonia, entre ellos uno con lesiones graves que fue trasladado al hospital comarcal.
El experto militar Rabea al Yauari confirmó que la demora en la liberación del oeste de la población se debe a las malas condiciones climatológicas.
Aseguró que la situación humanitaria es "catastrófica" y los habitantes, que sufren falta de dinero y medicamentos, estarán afectados por este retraso.
Además, alertó, puede llevar a que las células durmientes del Ei en el este de Mosul "reorganicen sus filas para despertar de nuevo".
También afirmó que cualquier conflicto que surja en esta etapa afectará al combate previsto y abrirá las puertas a un nuevo deterioro de la seguridad.
Las fuerzas iraquíes, con el apoyo de la coalición internacional, están allanando el terreno para lanzar la tercera fase de la Batalla contra Mosul, cuyo objetivo es recuperar los distritos del oeste de la urbe, dividida en dos por el río Tigris, que lo atraviesa de norte a sur.