Las mayores afectaciones se presentan en el cementerio municipal, donde las inundaciones han obligado a implementar planes de contingencia.
Tras las fuertes lluvias que se presentaron en las últimas horas sobre el departamento del Chocó, el río Atrato sufrió un desbordamiento que inundó el municipio de Riosucio con consecuencias que derivaron en la necesidad de decretar alerta naranja por la creciente súbita que mantiene incomunicados a los residentes de esta localidad.
El principal problema se ha presentado en el cementerio municipal, donde varias tumbas han sufrido el impacto de las inundaciones al punto de llevar a los habitantes a ubicar objetos pesados contra las paredes de algunas bóvedas para evitar que los cuerpos floten o se vean afectados por la humedad.
La unidad de gestión del riesgo y la alcaldía de Riosucio pidieron ayuda a la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, afirmando que la calamidad pública desbordó la capacidad de atención del municipio.