Según el parte entregado desde la Alcaldía, el ataque perpetrado en contra del automotor está relacionado con el conflicto en San Javier.
Un bus de la empresa Coonatra fue incinerado la tarde de este jueves en el barrio Calasanz. Según las primeras versiones entregadas por la Alcaldía, dos sujetos en una moto se acercaron al conductor para exigirle que abriera las puertas, cuando los pasajeros comenzaron a descender, los sospechosos prendieron fuego y las llamas consumieron el vehículo.
El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, confirmó que no hubo pérdidas humanas y calificó a los autores del ataque como “unos cobardes”. Aseguró que serán judicializados por terrorismo y tentativa de homicidio.
Declaró que este hecho está relacionado a la situación de orden público que actualmente se presenta en la Comuna 13, San Javier, en donde se vive un enfrentamiento entre dos estructuras delincuenciales conocidas como la agonía y el coco.
El alto funcionario recalcó que, a consecuencia de los golpes propinados a los cabecillas de estos grupos delictivos, sus miembros han dado la orden de generar terror. Esta directriz de la ilegalidad, de acuerdo con Gutiérrez, puede evidenciarse en interceptaciones hechas por las autoridades.
El Mandatario dio a conocer algunos de los mensajes captados a los integrantes de las bandas, principalmente de sus altos mandos en prisión. Según sus palabras: “dizque es hora de juntarse, dejar la arrogancia y la soberbia, y demostrar que están dispuestos a todo”, dijo Gutiérrez.
“El mensaje que yo les doy es: vamos con toda, pero contra ellos. Estas personas van a caer, quienes están generando terror en la Comuna 13 van a caer”, agregó.
Sostuvo que la institucionalidad no permitirá que se extienda el terror que las organizaciones al margen de la ley quieren propagar. Instó a la ciudadanía a dar la “lucha juntos y a enfrentar a estas estructuras que se han fortalecido por años . El terror no puede ganar, debe ganar la confianza”.
En San Javier se han registrado tiroteos y fallecidos en medio del fuego durante el transcurso de esta semana. El comandante de la Policía Metropolitana del valle de Aburrá, general Óscar Gómez, afirmó que un total de 300 efectivos de su institución, sumados a 120 militares, custodiarán los puntos críticos de la comuna.
Así mismo, reveló que habrá una recompensa de $20 millones por la información que conduzca a las capturas de los cabecillas de la agonía y el coco, en especial por alias juancito, quien sería el principal gestor de las acciones para atemorizar a la comunidad.
El alcalde manifestó que su Administración pretende fortalecer la presencia allí, aunque aclaró que no sólo a través de la fuerza pública, también, con oferta cultural, académica y deportiva, mencionó.