Se cumple el 150 aniversario del nacimiento del escritor y novelista de ciencia ficción.
Hace 78 años, miles de ciudadanos salieron asustados a las calles de Nueva York (Estados Unidos) por la supuesta invasión alienígena que provenía del vecino planeta Marte.
“Damas y caballeros, tengo que anunciarles una grave noticia. Por increíble que parezca, las observaciones científicas nos obligan a creer que los extraños seres que han aterrizado esta noche en una zona rural de Jersey (Nueva York) son la vanguardia de un ejército invasor procedente de Marte”, relató el locutor Orson Welles, a través de la cadena radial Columbia Broadcasting System (CBS) un 30 de octubre de 1936.
Aunque se hablaba de “lo más terrorífico que nunca se había presenciado”, de caras extraterrestres con “grandes ojos” como “dos discos luminosos”, lo que no sabían los ciudadanos es que esta narración radial hacía parte de un programa basado en la dramatización de obras literarias que Orson Welles interpretaba. Se trataba de la novela La guerra de los mundos (The War of the Worlds, 1898), del escritor de ciencia ficción Herbert George Wells.
Ciencia ficción
Este novelista, más conocido como H. G. Wells, es considerado uno de los principales precursores de la ciencia ficción en la literatura mundial junto a Julio Verne, según el especialista en edición de publicaciones y magíster en Literatura Colombiana, Carlos Alberto Álvarez.
“Esta atribución fue gracias a la técnica de verosimilitud (que parece verdadero o que es creíble) que H. G. Wells utilizó en su narrativa”, señaló el especialista y, al tiempo, explicó que en La guerra de los mundos “se incluyen varios nombres propios de lugares reales de Inglaterra, como Woking, que es una ciudad en el Condado de Surrey; Chertsey, otro municipio y Ottershaw, un pueblo inglés, todos del mismo condado.
Otro caso en el que se registra esta técnica, “con la idea de hacer creíble la historia”, es cuando H. G. Wells “brinda datos científicos para detallar cómo los marcianos hacen una observación, detenida y envidiosa de los habitantes de la Tierra”, destacó Álvarez.
En el siguiente fragmento de la novela puede apreciarse la mencionada técnica: “Casi no necesito recordar al lector que el planeta Marte gira alrededor del Sol a una distancia de 140 millones de millas y que recibe del astro rey apenas la mitad de la luz y el calor que llegan a la Tierra. El hecho de que tiene apenas una séptima parte del volumen de esta debe haber acelerado su enfriamiento, dándole una temperatura que permitiera la aparición de la vida sobre su superficie. Tiene aire y agua, así como también todo lo necesario para sostener la existencia de seres animados”.
Influencias en la ciencia
Las novelas de H. G. Wells influyeron en el ingeniero aeroespacial Wernher von Braun, diseñador del cohete Saturno V, que llevó la tripulación de hombres que pisaron la Luna por primera vez en la historia.
Por sus escritos relacionados con la ciencia, en 1970 un grupo de científicos de la Unión Astronómica Internacional (UAI) decidieron en su honor llamar H. G. Wells a un astroblema lunar, es decir, a la depresión que dejó el impacto de un meteorito en la superficie ubicada en la cara oculta de este satélite natural.
Las obras de este genio de la ciencia ficción inspiraron el futuro de aquella época y hoy sus libros son un legado literario que continúa vigente.
Otras novelas de ciencia ficción de H. G. Wells
La máquina del tiempo (The Time Machine, 1895), fue la primera novela publicada de H. G. Wells, en ella trató el tema político de la lucha de clases entrelazado con la ciencia y los viajes a través del tiempo.
En La isla del doctor Moreau (The Island of Dr. Moreau, 1896), Wells abordó la obligación de la acción ética del científico en los límites de sus descubrimientos.
Una temática similar a la publicación anterior descrita, adoptó Wells en la novela El hombre invisible (The Invisible Man, 1897).
Finalmente, en Los primeros hombres en la Luna (The First Men in the Moon, 1901), el autor utilizó la idea de hacer creíble la historia.
Estas novelas, junto a La guerra de los mundos, fueron la inspiración para la producción de varias películas cinematográficas, consideradas por los críticos como clásicos del siglo XX.