Las catorce excavadoras que la Fuerza Pública destruyó en Chocó durante la operación en contra de la minería ilegal, estaban avaladas en $7.000 millones aproximadamente.
En una operación unificada entre las Fuerzas Militares y la Policía Nacional, en coordinación con la Dirección Nacional de Fiscalías y la Procuraduría Judicial, Ambiental y Agraria del Chocó, se propinó un contundente golpe a la minería ilegal en el departamento, con la destrucción de maquinaria avaluada en $51.000 millones.
En la primera fase de las operaciones terrestres unificadas, llevadas a cabo en el municipio de Paimadó, cabecera municipal de Río Quito en Chocó, participó más de un centenar de uniformados especializados en la lucha contra la minería ilegal y el narcotráfico, quienes ocuparon los campamentos mineros y encontraron que eran administrados, en su mayoría, por personas de nacionalidad brasilera, que empleaban a pobladores locales para la explotación ilícita de los yacimientos.
Esta operación, que se extenderá hasta mañana, ha permitido la destrucción de 19 dragones identificados que, a diferencia de las dragas, son estructuras metálicas de gran capacidad, con una infraestructura de dos pisos operada por diez o quince personas y que produce entre 1 y 3 libras de oro por semana; el valor aproximado del kilo de oro en el mercado es de $136 millones.
El objetivo principal de esta intervención es afectar de manera contundente las finanzas de las estructuras criminales como los grupos armados organizados y el Eln, quienes se lucran de la minería ilegal para desarrollar diversas acciones delictivas y terroristas en el departamento de Chocó.
En Río Quito, el daño ambiental supera los $1.000 millones, con una alta probabilidad de que no se pueda restaurar, es por ello que la Fuerza Pública continuará desarrollando operaciones para combatir el flagelo de la explotación ilícita de yacimientos mineros en todo el país.