Según alias iván márquez, el Congreso "desfiguró" lo pactado en noviembre de 2016 entre las Farc y el Gobierno.
Luego de un año de la firma del acuerdo de paz, las Farc consideraron este viernes que el proceso está en crisis por lo que le pidieron al presidente colombiano, Juan Manuel Santos, que salve "lo que debería ser la más grande obra de su Gobierno".
Así lo afirmó el número dos de la Farc, alias iván márquez, quien aseguró que la crisis puede ser "pasajera si el presidente de la República, haciendo uso de sus potestades constitucionales, asume exclusivamente las riendas de su conducción".
El exjefe guerrillero, que dio en Bogotá un balance de la implementación del acuerdo de paz, manifestó que el Congreso "desfiguró" lo pactado en noviembre de 2016 entre las Farc y el Gobierno y criticó a los parlamentarios por su "poca visión e insensibilidad".
"El desarrollo normativo del acuerdo paz de La Habana, base de la construcción de nuestro futuro, transfiguró por momentos los edificios del Congreso en un mercado de transacciones de vicios y ambiciones que terminaron desfigurando lo pactado", dijo y lamentó que no consideraran la paz como "el más elevado de los derechos".
Destacó además que con paz se garantizan los derechos a la "alimentación, agua, vivienda, tierra, salud, educación, trabajo, vías de comunicación, buen transporte público, conectividad, democracia, tolerancia y más democracia" y reiteró que "ciertos parlamentarios" actuaron "sin tener en cuenta el sentido común".
Asimismo, lamentó que la aprobación de estas leyes en el Congreso se hubieran dado en plena campaña presidencial, donde considera "se exacerban las angustias y los sentimientos más repudiables de la politiquería".
"Debemos convenir que ha sido una desgracia que este ejercicio sublime de consagrar la paz como derecho superior de los colombianos ocurriera en época electoral (...) Es increíble que la paz haya sido sometida a aprobaciones indebidas de algunos de sus aspectos", aseveró.
El Senado aprobó este jueves por mayoría el informe de conciliación de la Ley Estatutaria, que reglamenta la aplicación de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) en el último día del "fast track", el mecanismo de vía legislativa rápida para tramitar leyes y normas para la implementación del acuerdo con las Farc.
En la conciliación quedaron consignados los nuevos requisitos para los magistrados de la JEP, los cuales ya fueron designados. Igualmente, con lo aprobado en el Senado se habilitó la participación en política de los exguerrilleros de las Farc, quienes antes deben someterse ante la JEP, comprometerse a decir la verdad y reparar a las víctimas.
El número dos de las Farc aseguró que en el Congreso se ha "desvertebrado" el concepto de Jurisdicción Especial para la Paz pactado con el Gobierno en La Habana porque considera que ahora es una justicia concebida "especialmente" para los exguerrilleros.
"Ahora aparece como una jurisdicción especialmente concebida para las Farc, para una de las partes, cuando su presupuesto inicial era que este sería un componente de (...) justicia, reparación y no repetición para todos los involucrados en estos crímenes", manifestó.
De igual manera, aseguró que el Estado colombiano hizo una declaración unilateral ante las Naciones Unidas que generó unas obligaciones internacionales que no se pueden "soslayar". "Pedimos el pronunciamiento de esas altas instancias internacionales para que el Estado respete la ruta consensuada entre las partes para llegar a la paz", añadió.
El pasado 21 de noviembre el jefe de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, Jean Arnault, dijo que al menos el 55 % de los 8.000 exrebeldes de las Farc que se acogieron al acuerdo de paz abandonaron las 22 zonas creadas para su tránsito a la vida civil por "desilusión" ante la ausencia de oportunidades económicas.
Márquez manifestó que los exguerrilleros pueden entrar y salir cuando quieran de estas zonas, por lo que algunos han ido a visitar a sus familias pero están pendientes de que comiencen a funcionar los proyectos productivos para su reintegración a la vida civil.
"Yo estoy seguro de que muchos de ellos tan pronto vean que comenzó a funcionar lo de los proyectos productivos van a regresar inmediatamente a estos espacios territoriales. Pero no crean que han quedado desolados, ahí está la gente trabajando", concluyó.