El Ministerio de Educación Nacional presentó en junio del 2016 la estrategia En la Noche Estudio, mediante el cual 24 Instituciones de Educación Superior (IES) del país ofertarían 4.500 cupos en 109 programas académicos en jornada nocturna, a partir del segundo semestre de 2016. En ese momento la dependencia también señaló que para el 2017 esperaba que más instituciones se sumaran al programa.

Sin embargo, en Medellín parece que sólo las universidades de carácter privado adoptan este modelo de educación nocturna y que, bajo la mencionada estrategia, lo hacen el Instituto Tecnológico Metropolitano (ITM), la Escuela Superior Tecnológica Débora Arango y la Universidad de Antioquia, que ofrecen educación pública.

Andrea Morales, cuyo nombre ha sido cambiado a petición suya, narró a EL MUNDO que en diciembre del 2016 presentó el examen de admisión para la Facultad de Arquitectura en el Colegio Mayor de Antioquia. Semanas después conoció que fue admitida.

Morales, quien trabaja en una empresa de confecciones, afirmó sólo tener tiempo para estudiar  luego de las 5:00 p.m., razón por la que se dirigió al área de Admisiones de la institución  y le informaron que luego de pagar el costo de la matrícula, de aproximadamente $700.000, podría cambiar de jornada diurna a nocturna. 

“Cuando salieron los horarios volví a ir a la universidad para cambiar las materias para la noche como me dijeron que podía hacer. Al llegar allá me informaron que esa carrera no tenía jornada nocturna, que si no la podía ver en los horarios que tenían que entonces que cancelara. Yo busqué la forma de no cancelar y escoger materias pero sólo podía ver Matemática un viernes en la noche pero que igual la matrícula era de $700.000 y no me pareció justo pagar ese dinero para ver sólo una materia, por eso cancelé ”, dijo Morales.

De acuerdo con lo explicado por Gina Parody, quien era ministra de Educación al momento del lanzamiento del programa En la Noche Estudio, el propósito de ampliar las jornadas en las instituciones de educación superior de diurnas a nocturnas era precisamente “facilitar  el estudio a la población trabajadora, a las madres y padres cabeza de familia y, en general, a quienes durante el día no tienen posibilidad de matricularse en un programa académico que ofrezca clases en la mañana y en la tarde”. 

Edward Rodríguez Ramírez, vicerrector de docencia del ITM, aseguró que existe un alto porcentaje de estudiantes de esa institución que realizan su formación en la jornada nocturna por razones laborales, por lo que la capacidad instalada de la infraestructura es copada luego de las 6:00 p.m.
“Si bien en Antioquia hay una oferta importante en educación superior, aún falta mucho en la implementación de nuevas líneas de estudio en esta jornada, como por ejemplo lo es Contaduría Pública”, afirmó Rodríguez Ramírez.