Hace una semana el país se sacudió con la captura de Luis Gustavo Moreno, jefe de la Unidad Anticorrupción de la Fiscalía General de la Nación, acusado de haber recibido un soborno. Días después 24 personas vinculadas a la Rama Judicial también quedaron en manos de la justicia por favorecer a delincuentes. Pero ayer la sorpresa tocó el patio de nuestra casa ante la captura del secretario de Seguridad de Medellín, Gustavo Villegas Restrepo, uno de los más poderosos e influyentes integrantes del equipo de Gobierno del alcalde Federico Gutiérrez. Al dar a conocer a la ciudadanía algunos detalles sobre la investigación en la que se acusa a Villegas de concierto para delinquirlos, el mandatario fue enfático en que ha instruido a sus secretarios para “enfrentar a las estructuras criminales con toda la contundencia en el marco de la constitución y la ley” y ha ofrecido su colaboración para que la Fiscalía cumpla con su labor investigativa.

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Por el delicado cargo que ocupaba Villegas, por su cercanía con la primera autoridad municipal y para honrar a quienes arriesgan su vida para brindar seguridad a los ciudadanos, hacemos votos para que, efectivamente, haya mucha colaboración en este proceso, pues hay que recordar que este funcionario había sido ya objeto de investigaciones y cuestionamientos no totalmente esclarecidos durante su paso por cargos públicos en la alcaldía de Sergio Fajardo.

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