Las alarmas continúan encendidas para los empleados de la E.S.E Bello Salud, quienes no han recibido salario desde el pasado mes de noviembre.

De acuerdo con una circular difundida a principios de noviembre, la empresa, que atiende a pacientes del Régimen Subsidiado de Bello, se encuentra en una grave crisis financiera que podría estar influenciada por las deudas de las EPS Savia Salud y Caprecom.

"La empresa se encuentra en Programa de Saneamiento Fiscal y Financiero lo cual conlleva a un sinnúmero de decisiones en pro de salir de la difícil situación en la cual nos encontramos, este programa tiene una duración de cuatro años y como mínimo hasta el año 2021 de acuerdo al cumplimiento o no de las estrategias establecidas", señaló en una circular su gerente Javier Alejandro Bedoya Toro.

Ante esto, Juan Carlos Saldarriaga, odontólogo e integrante del sindicato Sintrabellosalud, dijo que los turnos “no se nos pagan desde octubre, lo único que se nos pagó a finales de año fue la prima de diciembre. El 3 de enero se suponía que iban a pagar las cesantías, porque si nos pagaban salario no pagan las cesantías. Uno a estas alturas de enero y nos deben noviembre, hay muchos atrasos, las vacaciones de diciembre tampoco nos las han pagado. Se suman deudas y deudas, cada vez son más los requerimientos y los derechos y menos plata".

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Dado a que las dificultades persisten los empleados programaron una manifestación pasiva para pedir una solución pronta a su problema, ya que cada vez es más lo que se le adeuda a quienes luchan por la salud de los habitantes del sector.

Sin embargo, Isaac Cure, también miembro del sindicato, confirmó que la administración programó para el próximo lunes 29 de enero una asamblea en la que se explorarán las propuestas que permitan el pronto pago a los empleados.

Entre los temas que se tratarán durante la reunión está el pago de los servicios prestados durante el mes de noviembre, que tendrían que ser saldados la próxima semana, el desembolso del dinero que se adeuda a los empleados desde antes, el pago de la quincena de diciembre y un crédito con el respaldo del Concejo municipal, el cual se debe proponer antes del 28 de febrero.

De no darse las garantías suficientes para el bienestar de los afectados, ni llegar a una conclusión, la manifestación se activaría de nuevo y los empleados saldrían a las calles a exigir prontas soluciones.