La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (Eln) aseguró este sábado que entiende el dolor de los familiares de los cinco policías muertos en el atentado que perpetró hace ocho días en Barranquilla, pero que es necesario conocer también lo que sufren los insurgentes como parte del conflicto armado.

"Entendemos el dolor de las familias de los policías, pero también hay que entender el dolor de las familias de los guerrilleros muertos y líderes sociales", dijo Bernardo Téllez, delegado del grupo insurgente en los diálogos de paz con el Gobierno que se adelantan en Quito, según reseña Blu Radio.

El vocero manifestó que la situación de orden público en Colombia es "trágica", por lo que consideró urgente la unión nacional para terminar con la confrontación armada.

El Eln se atribuyó el viernes el atentado contra la estación de la Policía colombiana perpetrado en Soledad, ubicado en el área metropolitana de la caribeña Barranquilla, que dejó cinco uniformados heridos.

Además de ese ataque, la guerrilla reconoció la responsabilidad del atentado del pasado sábado contra una estación policial en Barranquilla en el que murieron cinco policías y 41 personas más resultaron heridas.

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El Eln perpetró otro atentado en el caserío de Buenavista, que hace parte del municipio de Santa Rosa, departamento de Bolívar, con saldo de dos uniformados fallecidos y dos heridos.

Los diálogos de paz quedaron el pasado 29 de enero nuevamente en entredicho por los atentados, hecho que llevó al Gobierno Nacional a tomar la decisión de suspenderlos.

"El quinto ciclo se instalará cuando el Eln haga compatible su conducta con la exigencia de paz del pueblo colombiano y de la comunidad internacional", dijo el presidente Juan Manuel Santos con respecto a los diálogos que desde el 7 de febrero del año pasado se desarrollan en Quito.