Gracias al hallazgo periodístico de un sicario que las Farc colaron en la lista de 709 “gestores de paz” que el Gobierno Nacional les certificó, el país conoció otro de los mecanismos por los cuales se brindan garantías especiales a los guerrilleros en proceso de desmovilización. Por el abuso, puso en examen el listado de agraciados con el título.

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“Gestores de paz” es una figura creada para facilitar la excarcelación de farianos no amnistiados o indultados, a fin de que, bajo control de las Farc y revisión del Gobierno, se vinculen a la reparación, en desminado o búsqueda de desaparecidos, o apoyen la desmovilización. El primer grupo beneficiado por esta medida fue candidatizado por las Farc en febrero y certificado por el Comité técnico interinstitucional para la verificación de listados, integrado por las Fuerzas Armadas y la Fiscalía, en mayo. En agosto se produjo la excarcelación de las personas.

Con una rápida búsqueda en internet, cualquier ciudadano encuentra que Alexander Romero Sepúlveda es un jefe sicarial de Bogotá, condenado a 14 años de prisión por crímenes cometidos en la “guerra de las esmeraldas”. A pesar de ello, el Comité técnico lo certificó para ser excarcelado, a petición de las Farc y el Gobierno le concedió el importante beneficio alegando que la lista “es recibida de buena fe de conformidad de confianza legítima”. Ante la dimensión de la trampa que su incompetencia permitió, mal puede la Oficina del Alto Comisionado seguir alegando inocencia en tan grave hecho, menos no dictar correctivos inmediatos.

El error del Gobierno Nacional es muy grave y exige correcciones en la persona ilegalmente favorecida y en el mecanismo de vigilancia de candidatos. Pero esa seriedad no oculta el dolo de las Farc al vincular como uno de los suyos a un avezado criminal. Si en efecto la Oficina del Alto Comisionado reconoce que las Farc “se hacen responsables de la veracidad y exactitud de la información” construida en esas listas, también ha de estar obligada a exigir al mando responsabilidad y rendición de cuentas por tan seria trampa al país.

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El diario El Tiempo informó, sin que exista comunicación gubernamental, que el sicario Romero será excluido del grupo de “gestores de paz”. Aún no es claro cuál será la sanción para él, cómo lo regresarán a la cárcel y cómo exigirán cumplimiento a las Farc. Tampoco se informa sobre los mecanismos de depuración de las listas de “gestores de paz” entregadas por las Farc, que han de estar a cargo del Gobierno, no de los medios de comunicación.

Comentarios:

Edgar
2017-09-08 08:10:58

No puede haber buena fé en los famosos terroristas farianos, enseñados a mentir toda la vida. Es la razón por la que el gobierno y sus adláteres han figurado como idiotas útiles. Por eso se dan estos casos y quién sabe cuántos más habrá.

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