Maquilladores especializados en novias señalan que el maquillaje debe ajustarse al estilo y resaltar la naturalidad. No es que no se note, sino que resalte rasgos y corrija imperfecciones del rostro sin parecer “empastada”.
No hay novia que no quiera lucir hermosa el día de su boda. Así como debe escoger el vestido con meses de anticipación, necesita invertir tiempo en asesorarse y decidir el maquillaje correcto para la ocasión.
Andrés Casallas, maquillador del staff de Franklin Ramos, recomendó tener, por los menos con un mes de anticipación, una cita con el maquillador para buscar una opción con la que la prometida se sienta cómoda.
A su vez, Marisol López, maquilladora especializada en novias, señaló que es necesario contar con asesoría profesional.
Si no cuenta con el maquillador indicado, “puede pasar que al ver las fotos de la boda, la novia se dé cuenta que la base era muy oscura, el rubor exagerado o colores demasiado fuertes”, agregó Casallas.
La tendencia es lo natural, según afirmó el maquillador, “que los ojos sean expresivos pero no sobrecargados”.
López indicó que para las novias realizan maquillaje correctivo, “pulir imperfecciones o resaltar rasgos bonitos del rostro, corregir nariz pómulos, ojeras. La idea no es dejarlas empastadas, que se sientan tranquilas, naturales y que reluzcan su personalidad”.
Emiro Buitrago, diseñador de imagen, apuntó que como los vestidos suelen ser blancos, se ve muy bien contrastar con un tono oscuro la sombra de los ojos, “da una apariencia enigmática.
Según él, este maquillaje no debe “hacer perder la esencia de la novia, lo que la hace ella”, y explicó que un maquillador debe corregir las imperfecciones, “buscar una forma de rostro ovalada”.
Para la noche, el maquillaje debe ser más fuerte, precisó Buitrago, “el día resalta el maquillaje, la noche, en cambio, se lo come”, por lo tanto recomendó los brillantes y perlados.
Buitrago sugirió a las novias buscar maquilladores con mucha experiencia, porque pulir los rasgos de manera que se adecue a sus necesidades es complicado. El estilista “debe saber de morfología, composición y ser muy preciso”.
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Tratamientos y sugerencia
López explicó que normalmente las novias “aprovechan la semana previa para hacerse todos los tratamientos de belleza, realización del bronceado con aerógrafo, una técnica natural que hace una reacción química sobre la piel; aplicar un esmalte para las uñas que permanece quince días, que no se levanta, ideal para que no sufran el día de la boda porque se les dañó una uñita; ir al espá, hacerse mascarillas faciales, iluminaciones, terapias relajantes”.
Recomendó que el día de la boda, la novia lleve un polvo “para que en las horas de la noche puedan darse un retoque, sobre todo en la base. También un labial si pueden porque es normal que después de una comida o de saludar a todo el mundo, el labial no tenga la misma naturalidad que recién aplicado”.
“Es muy común que las novias estén trasnochadas, cansadas por la planeación de la boda. Es bueno utilizar gotas para aclarar un poco los ojos, obviamente hay que hacer una prueba de alergia antes. Los ojos quedan lindos, grandes luminosos y para la fotografía va a ayudar demasiado”, concluyó López.