Con una reproducción de la belleza de los bosques y sus flores mediante una interpretación subjetiva, el Pintor de los colores frescos y brillantes, Humberto Echavarría, exhibe en el Museo El Castillo su representación de la poesía del paisaje.
Poéticas de la naturaleza y el color es una exhibición que detalla las particularidades de la naturaleza antioqueña y es la más reciente muestra del pintor local Humberto Echavarría en el Museo El Castillo, la cual estará abierta al público hasta el primero de julio en la Sala de Arte.
Uno de sus cuadros es Jardín del Edén, fresco pintado en 1973, el cual se realizó con una técnica anterior a la que el maestro actualmente utiliza. Fue creada cuando él vivía en Estados Unidos y fue el primer cuadro que exhibió en el Salón de Artistas de Chicago, ciudad en la que hizo larga carrera hasta que le entró la nostalgia por su tierra y se devolvió para Medellín.
No es preciso decir que con esta obra se originó la muestra, lo que sí fue claro en asegurar Echavarría es que este cuadro sirvió para madurar la exhibición durante más de 45 años.
Cada cuadro tiene diferentes influencias, “de acuerdo al tiempo que vivía cuando la realicé”, comentó.
Para este maestro antioqueño el arte es como la ciencia, “uno no se puede quedar quieto sin ir mejorando las obras, si no seguir adelante, porque así no se queda quieto el pan de queso”, sonrió al decirlo.
Él explicó la dualidad entre poética y naturaleza a partir de la relación paisaje y poesía. “Es decir, el paisaje es una poesía realmente. Cuando uno lee la obra María, de Jorge Isaac, se puede deleitar con lo que más se narra que es la belleza y exuberancia del Valle del Cauca, y acá pues tenemos eso mismo pero representado en Antioquia”, dijo al señalar los cuadros.
Podría decirse que en esta exposición el paisaje se convirtió en un poema. Y aseguró el pintor que la poesía siempre ha estado en su arte.
En los cuadros que están exhibidos se utilizaron técnicas como la acuarela y el óleo, con ellas el maestro logró darle vida a sus formas. Cada uno representa un exótico paraíso perdido ahí entre tanto color.
Se nota en la muestra una cálida sensibilidad con todo lo que al ser humano lo rodea. Está llena de detalles, se evidencia que hubo gran esfuerzo cromático y creativo en su estilo propio.
Los colores de los cuadros son fuertes, explicó don Humberto que los inspiró el colorido del trópico, “aquí por donde uno pasa hay ventas de frutas, se ve a las señoras con sus palenqueras, por ejemplo, y todo eso da un color completamente tropical y único”, dijo.
Con esta muestra, el maestro Humberto Echavarría se siente realizado, no puede ser para menos cuando llega a la sala y la ve llena de visitantes, extranjeros y locales, interesados en sus pinturas y su técnica.
Los cuadros están llenos de flores, una de sus especialidades; árboles, aves, bellas durmientes, bañistas o limpios bodegones.
Una parte de esta colección ya se había expuesto en la Biblioteca Pública Piloto en 2014, como muestra de la naturaleza local en plena Feria de las Flores.