El prontuario de gavilán inició en la decada del noventa y cuenta con participación en organizaciones criminales de todo tipo.
La baja de alias gavilán se dio luego de que la Policía relanzara la operación Agamenón II, estrategia militar que incluye recompensas hasta por 5 millones de dólares por delaciones que lleven a la captura de los máximos jefes del clan del golfo, entre ellos a su máximo cabecilla, Dairo Antonio Úsuga David, alias otoniel.
Según el Centro de Investigaciones de Crimen Organizado, Roberto Vargas Gutiérrez alias gavilán, comenzó su carrera delictiva con el grupo guerrillero Epl, que se desmovilizó en 1991. Hacia mediados de la década del 90 retomó las armas, uniéndose a grupos paramilitares en la región de Urabá y en 1995 alertó por primera vez a las autoridades cuando se le identificó liderando un grupo de 100 combatientes, pertenecientes al ejército de Salvatore Mancuso, en San Pedro de Urabá.
Posteriormente, gavilán se unió al bloque mineros de las Autodefensas Unidas de Colombia (Auc), liderado por Ramiro “cuco” Vanoy. Con este grupo operó principalmente en el Bajo Cauca antioqueño, en los límites con el departamento de Córdoba.
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Alias gavilán se desmovilizó nuevamente en 2005, durante las negociaciones de Santa Fe de Ralito (Córdoba), pero seis meses después, los hermanos Úsuga; Juan de Dios, alias “giovanni”, y Darío, alias “otoniel”, quienes coincidieron con Gavilan en ambas organizaciones delictivas, lo invitaron a unirse al clan del golfo.
Desde entonces gavilán ascendió hasta el máximo escalón jerárquico de esta organización delictiva, llegando a dirigir las operaciones en el departamento de Córdoba, hasta ser abatido este jueves en el caserío Titumate, zona rural del municipio de Unguía.