Washington también pide flexibilidad en los gravámenes que le imponen sus socios europeos, de esta manera continuaría la exención temporal de aranceles a importaciones procedentes del Viejo Continente.
Estados Unidos mantendrá las exenciones a los aranceles a la importación de acero y aluminio de la Unión Europea (UE) "si hay concesiones" por parte de las autoridades de Bruselas, afirmó este jueves Larry Kudlow, principal asesor económico de la Casa Blanca.
"Es muy importante que ciertos amigos nuestros hagan concesiones respecto a las prácticas comerciales, los aranceles e impuestos. Por ejemplo, uno de los problemas es el del tratamiento equitativo de los automóviles y nosotros queremos ver algunas concesiones de Europa", remarcó Kudlow.
Kudlow apuntó, no obstante, que "todo forma parte de la negociación" actualmente en marcha.
El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció la imposición de aranceles del 25% a las importaciones de acero y del 10% para las de aluminio, aunque eximió temporalmente a una serie de socios comerciales, entre ellos los miembros de la Unión Europea.
La exención, de carácter temporal, finaliza el próximo 1 de mayo, por lo que Trump deberá decidir si las prolonga o no.
Los líderes europeos han elevado la presión sobre Washington para que dé marcha atrás.
A comienzos de semana, viajó a Washington el presidente francés, Emmanuel Macron, y este viernes lo hará la canciller alemana, Ángela Merkel, ambos con la intención de convencer a Trump de que no debe aplicar los aranceles a la UE.
La comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmström, que dirige las conversaciones sobre este asunto, insistió en que el objetivo de Bruselas es la exención "incondicional y permanente" de estos gravámenes comerciales, y subrayó que "bajo ninguna circunstancia" van a negociar nada "bajo presión o amenazas".