El Gobierno cubano ha negado toda responsabilidad en los hechos, que está investigando, y ha dicho que, hasta el momento, no existe "evidencia alguna" que confirme las denuncias sobre un presunto "ataque acústico" a los estadounidenses en la isla.
Estados Unidos suspendió este viernes indefinidamente la emisión de visados a cubanos desde su embajada en La Habana y la retirada de más de la mitad de los funcionarios que allí laboran. De igual forma pidió a los norteamericanos que no viajen a Cuba, al asegurar que no pueden garantizar su seguridad tras los "ataques" que sufrieron por lo menos 21 estadounidenses que están en la isla.
"Las operaciones rutinarias de visado se suspenden de forma indefinida" en la embajada estadounidense en La Habana, según declaró un alto funcionario del Departamento de Estado, que pidió el anonimato.
Además, agregó que estas medidas pretenden "minimizar el número de personal estadounidense con riesgo de quedar expuesto" a los ataques.
Esa reducción de personal se mantendrá "hasta que Cuba pueda garantizar la seguridad del personal" estadounidense en la isla, agregó.
Estados Unidos no responsabiliza directamente al Gobierno cubano, al menos por el momento, de los daños a la salud de al menos 21 miembros de su personal en La Habana, que hasta este viernes definía como "incidentes" y ahora identifica como "ataques específicos".
"El Gobierno de Cuba es responsable de dar todos los pasos pertinentes para prevenir los ataques de nuestro personal diplomático en Cuba", afirmó el funcionario.
Los gobiernos estadounidense y cubano siguen investigando los sucesos, cuyo último episodio tuvo lugar en agosto, y Washington "no ha descartado la posibilidad de que un tercer país" haya podido estar implicado en los sucesos, según dijo el funcionario al ser preguntado por la posibilidad de que Rusia sea responsable.
"Queremos subrayar que estas decisiones se tomaron para asegurar la seguridad de nuestro personal. Mantenemos las relaciones diplomáticas con Cuba", puntualizó el funcionario.
El exilio, muy satisfecho
Dirigentes del exilio cubano en Miami reaccionaron con satisfacción ante las nuevas medidas de Estados Unidos contra Cuba e incluso algunos opinaron que deberían ir más lejos y llevar al cierre de la embajada en La Habana.
"Van en la dirección correcta", que es "ayudar a acabar con el régimen de la isla en el corto plazo", aseveró Orlando Gutiérrez, del Directorio Democrático Cubano.
María Elena Alpízar, representante de las Damas de Blanco en Estados Unidos, indicó, por su parte, que está de acuerdo, pero no "contenta del todo", porque a su juicio las relaciones diplomáticas deberían volver al "status quo" de antes de la normalización acordada por Barack Obama con Raúl Castro en 2015.
El presidente estadounidense, Donald Trump, debería "suspender la condición de embajada" a su representación diplomática en Cuba y no darle "más prebendas a la tiranía castrista", agregó.
Silvia Iriondo, dirigente de Madres y Mujeres contra la Represión (MAR por Cuba), señaló a Efe que estas medidas muestran que obviamente en la reciente reunión del secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, y el canciller cubano, Bruno Rodríguez, "no le fue bien al régimen de Cuba".
Ambos se reunieron en Washington el 26 de septiembre para hablar sobre los supuestos "ataques acústicos" que sufrieron hace meses varios diplomáticos estadounidenses en la isla.
Rodríguez le "reiteró" a Tillerson que "el Gobierno cubano no ha perpetrado nunca ni perpetrará ataques de ninguna naturaleza contra diplomáticos. Tampoco ha permitido ni permitirá que su territorio sea utilizado por terceros para este propósito".
Iriondo manifestó su apoyo a la política aplicada respecto a Cuba por el Gobierno de Trump y reclamó, al igual que hizo Alpízar, "más sanciones".
Preguntada sobre si no teme que las medidas perjudiquen al pueblo de Cuba, Iriondo, al igual que Orlando Gutiérrez, opinó que las penurias que sufren los cubanos se deben a cuestiones internas, no externas.
"Sufren por las condiciones que les impone el régimen castrista", que es el único responsable, aseveró.
El politólogo y director de la organización Patria de Martí, Julio M. Shiling, consideró en unas declaraciones a Efe que las medidas anunciadas son "una respuesta corta teniendo en cuenta lo ocurrido". "Es algo flojo y se puede revertir en cualquier momento", agregó.
A su juicio, no hay duda alguna de que el castrismo es el responsable de los ataques acústicos. "La metodología ha cambiado, pero no los propósitos. Ahora el castrismo no usa guerrilleros en una montaña, sino gente de cuello y corbata", agregó.
Reacción cubana
El Gobierno cubano juzgó este viernes como "precipitada" la decisión de Estados Unidos de retirar más de la mitad de su personal diplomático en La Habana y limitar la emisión de visados como consecuencia de los supuestos ataques acústicos sufridos por funcionarios de ese país en la isla.
La directora para Estados Unidos de la Cancillería cubana, Josefina Vidal, afirmó ante los medios que esta decisión va a afectar a la relación bilateral, aunque reafirmó la voluntad de su gobierno de continuar "la cooperación activa entre las autoridades de ambos países".