El alcalde de turno cuando se negoció ese crédito ¿qué dirá?
Falta de previsión; costosa chambonada; pésimo asesoramiento en lo financiero; carreras en firmar movidos por causa no conocida, en fin, algo así debió ocurrir porque el municipio de Medellín tiene una carga enorme por cuenta de la deuda adquirida con los franceses para la construcción del Tranvía de Ayacucho. Según las Notas Confidenciales de J. Enrique Ríos y Duglas Balbin, el negocio se cerró con dólar a un máximo de $1.800 pero los pagos ahora se hacen con dólar a $3.000. Esa diferencia en el tipo de cambio, dijéramos, es normal en economías como la colombiana, en donde la moneda puede devaluarse por muchos factores, lo grave fue que al tomar el crédito ninguna cobertura cambiaria se hizo y de allí que la diferencia en contra (por el mayor precio del dólar) afecta seriamente al municipio. Por ejemplo, eso representó en 2016 un sobrecosto a cargo de Medellín por $147.000 millones. Antes no está el alcalde Federico medio loco buscando préstamos porque a la vista solamente están ingresos adicionales interesantes cuando entre en operación HidroItuango.
El alcalde de turno cuando se negoció ese crédito ¿qué dirá? porque, además, si hay problema con dólar a $3.000, ¿qué será cuando se ponga a $4.000, según estimaciones de expertos? punto que podría ser a principios de 2019 o, mejor dicho, después de que Santos termine su período y la realidad financiera del país sea destapada y dada a conocer completamente.
Por escrito solicité al señor Elejalde, gerente del Metro, su opinión o su explicación sobre este absurdo en la contratación de ese crédito. Pese a que ello fue hace más de 20 días aun la respuesta no llega y ya estoy pensando que no llegará, lo que es muy mal indicio y ello se une al hecho de que la administración municipal optó porque durante la alcaldía del señor Federico Gutiérrez no habrá decisión sobre qué se va a hacer a lo largo de la carrera 80, bien otra línea del metro u otro tranvía, pues la nación no da señales de poner los recursos que corresponden y a Medellín, con ese sobrecosto (por efecto cambiario) del tranvía de Ayacucho, no es que le sobre plata para una obra de tal envergadura.
Este asunto merece muchas aclaraciones y explicaciones porque es la salud económica de Medellín la que se ve afectada por dicha carga y no puede ser que aquí se estén planeando y haciendo obras a la loca, sin los debidos análisis y, sobre todo, como en este caso, sin tener en cuenta la referida cobertura, es decir, el salvavidas frente a una devaluación de nuestra moneda. Otra vez: de las carreras no queda sino el cansancio... y una deuda que come como un cáncer.
En los últimos 30 años los principales exportadores de petróleo a los Estados Unidos fueron (solo presento los cinco primeros): 1- Canadá con 17.280 millones de barriles; 2- Arabia Saudita 14.520 millones; 3- México 12.090 millones; 4- Venezuela 11.880 millones y 5- Nigeria 7.770 millones.
Los envíos de petróleo de Venezuela a Estados Unidos le dan oxígeno al régimen de Maduro porque se lo pagan de contado, aunque el precio del barril venezolano en el mercado internacional es inferior en unos 8 o 9 dólares por barril a lo que marca el WTI. Ese menor precio es debido a que son crudos muy pesados y en el mundo pocas refinerías lo procesan. De otro lado, también les paga de contado la India. En cuanto a lo que Venezuela manda a China es para servir la enorme deuda contraída con ese país, deuda tomada en términos y condiciones que no ha revelado con claridad el gobierno madurista.
Los Estados Unidos son el principal mercado del petróleo de exportación de Venezuela. Hoy algo así como un 8% de las importaciones de crudo de Estados Unidos proviene de Venezuela. Entre los clientes en el país del norte están, en primer lugar, Valero Energy, le siguen Citgo (filial de PDVSA en Estados Unidos), Phillips 66, Chevron Corp y PBF Energy Inc. Las ventas a Estados Unidos representaron como una tercera parte de los ingresos de PDVSA en 2016.