La colección arqueológica de oro fue obsequiada al país por el presidente Carlos Holguín Mallarino en 1892.
La Corte Constitucional ordenó este jueves al Gobierno reclamar a España el llamado Tesoro Quimbaya, una colección arqueológica de oro que el presidente Carlos Holguín Mallarino regaló al país europeo en 1892.
"La Corte Constitucional ordena al Gobierno la recuperación del bien cultural llamado Tesoro Quimbaya", señaló una fuente de la alta corte, quien explicó que la ponencia del caso estuvo a cargo del magistrado Alberto Rojas.
El fundamento de la decisión se basa en la "violación directa" de tres artículos de la Constitución que niegan la posibilidad de enajenar patrimonio cultural.
Esos tres artículos regulan que el presidente no tenía capacidad de regalar eso, por lo que la entrega "fue ilegítima", agregó la fuente.
El tesoro lo componen 122 piezas de oro que actualmente reposan en el Museo de América de Madrid. Fue descubierto en 1890 en el municipio de Filandia, departamento del Quindío.
Las piezas fueron elaboradas por la cultura precolombina Quimbaya, que habitó en el centro del país, donde fue diezmada durante la Conquista hasta desaparecer en el siglo XVII.
Su entrega a España se hizo efectiva en 1892 por Holguín Mallarino, que pretendía así agradecer la ayuda que le prestó la Corona europea en una disputa limítrofe con Venezuela, en el año en que también se conmemoraba en Madrid el IV Centenario del Descubrimiento de América.
La fuente de la Corte destacó que la orden al Gobierno implica que en primer lugar se abra "a través de la Cancillería" un canal con España para que Colombia "haga todas las gestiones diplomáticas necesarias en las que tenga competencias suficientes para traer el Tesoro Quimbaya".
En caso de no encontrar esos espacios se abriría la vía para que el Gobierno colombiano acuda a los tribunales internacionales, lo que "podría suceder en caso de que encuentre alguna repuesta negativa por parte del Gobierno español".
La decisión de la Corte pone a disposición del Ejecutivo colombiano las "herramientas que le da el derecho internacional", por lo que en caso de que haya una controversia pueda ser dirimida en una instancia internacional.
Las piezas del tesoro fueron exhibidas en Sevilla en dos Exposiciones Universales, las de 1929 y la 1992, con ocasión del Quinto Centenario del Descubrimiento de América, y posteriormente pasaron al Museo de América de Madrid.