Según Camacol, la construcción del año anterior dejó reducciones del 6.1% en las ventas de vivienda; una situación que esperan superar aprovechando los precios asequibles para este 2018.
Después de un 2017 difícil para el sector de la construcción, dado el decrecimiento del 10% en la oferta de residencia y del 6.1% en las ventas de domicilios, Camacol Antioquia vaticina un 2018 prometedor con transacciones cercanas a los $13 billones, aprovechando principalmente las bajas tasas de interés que ofrece el mercado para quienes están pensando en adquirir vivienda propia.
“Este año esperamos tener en el departamento antioqueño todas las cifras positivas relacionadas con la construcción, logrando ventas aproximadas de unas 23.000 unidades de vivienda, superando en un 7% las registradas el año anterior”, afirmó el gerente de Camacol Antioquia, Eduardo Loaiza Posada.
Según el representante de la agremiación constructora, estas proyecciones se fundamentan en el entorno positivo para este 2018, teniendo en cuenta las previsiones de entidades y analistas que hablan de un crecimiento económico en el país de 3%, además de una inflación controlada y bajas tasas de interés.
Loaiza aseguró que hay tasas históricamente bajas en créditos hipotecarios. Según el gerente, se puede estar hablando de intereses al 9% en los préstamos para la compra de casa, una reducción considerable frente a años anteriores cuando se registraba un 17% de usura.
“Igualmente hay que contarle a los antioqueños que podemos aprovechar los subsidios para Viviendas de Interés Social (VIS) de hasta $105 millones. Las casas hasta $340 millones tienen un auxilio adicional de 2.5%. Esto en la práctica es un ahorro del 30% en el costo del crédito, quiere decir que la cuota mensual del préstamo se pagaría por un valor inferior al de un arriendo”, dijo Loaiza.
Los subsidios que se tienen en el país, desde la óptica del gerente, se deben aprovechar en Antioquia, territorio que aporta el 15% de toda la actividad edificadora en Colombia, pero que no está acudiendo a estos amparos para la adquisición de casas.
“La idea es que la gente que va comprar vivienda este año o el entrante, solicite el subsidio. Hoy estamos usando únicamente el 7% de los auxilios existentes en el territorio nacional, si Antioquia no los usa, los verá utilizados en otros departamentos.
Las buenas proyecciones podrían verse afectadas para la actividad edificadora si no se resuelve la problemática que atañe a la falta de curadores en la ciudad de Medellín, que para este 2018 tiene 4.557 proyectos civiles en la agenda, de acuerdo a la información entregada por Camacol Antioquia.
Frente a esta situación, el representante legal de la agremiación constructora aclaró que el alcalde Federico Gutiérrez estuvo en conversaciones con el Gobierno Nacional para abordar esta queja del sector, y enfatizó en que se están haciendo esfuerzos conjuntos con la Superintendencia de Notariado y Registro, entidad que de acuerdo con Loaiza, debe identificar la “urgencia” de la ciudad en cuanto a los curadores.
El gerente de Camacol Antioquia reiteró que “la ciudad necesita cuatro curadurías en funcionamiento y apenas tiene dos equipos, es decir, estamos trabajando con media capacidad respecto a lo que se necesita”.
Loaiza consideró que en este contexto, la Superintendencia debería nombrar dos curadores encargados o permitirle a la Alcaldía esa competencia. A su juicio, la ausencia de estos funcionarios genera tres impactos: en primer lugar, las reformas no reguladas en diferentes estructuras por parte de la comunidad que no puede esperar lapsos de un año para obtener el permiso emitido de cara a esos trabajos.
En segundo lugar, los proyectos civiles represados por la falta de celeridad en trámites de autorización que normalmente toman 45 días, pero en Medellín están tardando hasta ocho meses.
“No es justo que ese perjuicio se traslade a los inversionistas y a las constructoras porque esto desestimula la construcción en Medellín”, replicó Loaiza.