“Al ciclista hay que darle la vía, como decía en la camiseta de nosotros, para ponernos en los pedales de ellos”. Fue la frase que Wilmer Chavarría, conductor de Metroplús, expresó a EL MUNDO al contar de qué trata la campaña que busca sensibilizar a conductores de transporte público con respecto a los ciclistas en la vía.

En los Pedales del Ciclista es una estrategia que las secretarías de Movilidad y Cultura desarrollan con el fin de recrear un juego de roles donde los conductores de buses, taxis y camiones puedan experimentar de forma real lo que se siente al desplazarse haciendo uso de la bicicleta en una ciudad como Medellín.

La iniciativa, según Santiago Silva, subsecretario de Ciudadanía Cultural de la Secretaría de Cultura, se ejecuta en un recorrido de entre 2 horas y 2 horas y 30 minutos en bicicleta por las calles de Medellín. Luego se brinda a los conductores unos talleres con agentes de tránsito y educadores viales sobre temas de seguridad vial.

“La intención del proceso es generar empatía y que sientan lo que es moverse en bicicleta en las calles, con los buses, donde pasan comportamientos de los que ellos muchas veces son protagonistas  y que ponen en riesgo a los ciclistas”, manifestó Silva.

El curso que tomó Chavarría salió del Velódromo y finalizó en la Terminal del Sur. Cada recorrido es diferente y varía por grupo de conductores. Cuando asistieron a la jornada educativa lo hicieron pensando que era un día recreativo, pero al llegar al sitio advirtieron que en parte la lúdica del evento era aprender a ser más amables con los ciclistas y peatones para reducir y evitar los incidentes de tránsito, que para mayo de 2018 rondan los 252.

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“Ahí es donde se da cuenta uno que hay muchos conductores a los que les da rabia cuando uno como ciclista les pide la vía”, relató Chavarría, quien no dudó en confesar que durante el recorrido “sentimos mucho a los taxistas y a los conductores de buses, como si les diera rabia encontrarse con el ciclista”.

Para Mauricio Mesa, socio fundador del colectivo y la Corporación Siclas, la campaña se presenta de forma positiva, toda vez que es una acción en pro de la pacificación del tráfico, la educación y la toma de conciencia a todos los actores viales.

La importancia, sostuvo, tiene que ver con que entre mejores hábitos de conducción y comportamiento haya en la vía, más van a incrementar los ciclistas en las calles, porque normalmente “la forma agresiva de conducción desestimula a que los ciudadanos nos montemos en la bicicleta, porque se siente la amenaza de los conductores”.

Hasta el momento, En los Pedales del Ciclista ha logrado impactar a 486 conductores de servicio público. La meta, al término de esta Administración, es completar 1.000 personas entre conductores de buses, taxis, volquetas y transporte logístico.

La clave de esta iniciativa, según Humberto Iglesias, secretario de Movilidad de Medellín, es enfocarla en tres temas básicos: “Cultura y educación, son dos factores que son fundamentales. Seguiremos sensibilizando, socializando, generando más conciencia sobre el uso de la bici y el adecuado uso de la infraestructura para que todos los actores viales respeten. Autoridad y el ejercicio de ella es el tercer factor para garantizar control”.

Iglesias destacó además el incremento en los viajes diarios realizados en bicicleta, que según la Encuesta Origen Destino 2017, crecieron de 0.7% en 2012 a 1% en 2017, lo que representa que de los 6.131.727 viajes que se hacen al día en el valle de Aburrá, al menos 61.842 se hacen usando la bicicleta, por lo que propiciar un ambiente seguro, que evite incidentes, para los ciclistas es más que una obligación, un reto.

“Este tipo de acciones y programas nos sirven mucho para mostrar una reducción en 
incidentes viales. Por ejemplo, Entre el 2017 y el 2018 disminuyeron casi el 2.5%. Es una 
reducción significativa debido a mayores campañas de cultura, educación vial y el crecimiento de infraestructura”, indicó el titular de la dependencia de la movilidad en Medellín.

Entretanto, el balance para Chavarría, como conductor de bus y ciclista ocasional, fue que “uno que debe ser más amigable con los ciclistas y peatones”.