Más de 10.000 campesinos cocaleros que se oponen a la erradicación de cultivos ilícitos continúan las protestas en el departamento del Cauca y específicamente sobre la vía Panamericana, esto con el fin de exigirle al Gobierno Nacional el cumplimiento de los acuerdos de la Habana.

Sus peticiones están basadas en la sustitución voluntaria de los cultivos ilícitos, así como garantías de seguridad para los líderes de la movilización. Sin embargo, estarían dispuestos a negociar la erradicación, siempre y cuando les ofrezcan verdaderos programas de sustitución.

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Según los recolectores de hoja de coca, la movilización que inició el pasado lunes 23 de octubre es permanente, por lo tanto esperan que el punto uno y el cuatro de los acuerdos de paz los sigan implementando.

Además, también exigen que tras haber sido quienes han sufrido el rigor de la guerra, se les siga dando un trato dentro de los derechos humanos, "porque se nos está tomando de forma criminal. Como fue el caso de Tumaco, campesinos que simplemente salen a defender su comida, entonces el  Estado con su fuerza pública los asesina", señaló un vocero.

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Por su parte, Hernán Paviul, gobernador del Resguardo Indígena de Pueblo Nuevo, expuso a medios nacionales que se requiere la intervención del Gobierno, no desde la erradicación o fumigación, sino desde la sustitución concertada de cultivos.

Los manifestantes ubicados específicamente en el municipio de Patía (Cauca), buscan bloquear cada cuatro horas la Panamericana entre Popayán y Pasto. Mientras que en Norte de Santander, dieron a conocer que se movilizarán en la vía entre Cúcuta y Ocaña, y en el campo petrolero en Tibú. "Seguimos firmes y estamos esperando más delegaciones del Suroccidente del país", concluyó el funcionario.