Esto lo aseguró la primera ministra, Theresa May, en sus primeras declaraciones luego del ataque.
La primera ministra británica, Theresa May, informó que los heridos en el ataque en Londres cerca del Parlamento británico incluían doce británicos, tres franceses, dos rumanos, cuatro surcoreanos, un alemán, un chino, un irlandés, un italiano, un polaco, un norteamericano y dos griegos.
Cuatro personas murieron en el atentado, incluidos el agresor, un policía británico de 48 años, Keith Palmer, otro varón de entre 40 y 50 años, y una mujer de 43 años, Aysha Frade, quien tenía nacionalidad británica aunque era de origen español.
Según los medios locales, Frade, casada y con dos hijas, estaba cruzando el puente de Westminster desde su trabajo para recoger a las niñas del colegio cuando fue atropellada por el agresor.
El terrorista mató a dos peatones e hirió a varios más antes de salir de su carro con un cuchillo y apuñalar a Palmer, que vigilaba la entrada a las Casas del Parlamento.
Al menos 29 personas resultaron heridas en el suceso, de las cuales alrededor de doce fueron hospitalizadas y siete están en estado crítico.
May reveló en una intervención parlamentaria que el atacante, que fue abatido a tiros por la Policía tras acuchillar a Palmer, era británico y conocido por los servicios secretos.
También dijo que seguramente actuaba "solo", aunque la Policía investiga sus posibles conexiones con el terrorismo islamista y ha detenido a ocho personas en domicilios de Birmingham (centro inglés) y Londres en relación con este atentado.
El ministro de Defensa, Michael Fallon, dijo previamente en declaraciones a la BBC que el Gobierno y la Policía trabajan sobre la base de que el atentado cometido frente al Parlamento y en el puente de Westminster está "ligado al terrorismo islamista".
May confirmó que el nivel de alerta terrorista en el Reino Unido se mantiene en "severo", el cuarto más alto de una escala de cinco, puesto que el quinto indicaría que un atentado es "inminente".