Este miércoles a las 6:00 a.m. se cerrara la primera de las dos compuertas por donde está ingresando el agua del río Cauca a la casa de máquinas de Hidroituango. Lo que pueda ocurrir al interior del macizo obliga a las autoridades a permanecer en alerta.
La generación de un flujo de agua incontrolable que ponga en riesgo la vida de las comunidades aguas abajo del proyecto hidroeléctrico de Ituango o, por el contrario, una reducción tal del caudal que afecte el suministro a los pobladores por insuficiencia en las bocatomas de los acueductos, son los escenarios extremos ante el cierre de la primera de las dos compuertas por las cuales ingresan las aguas del río Cauca que corren por la casa de máquinas de la megaobra.
El cierre está programado para las 6:00 de la mañana de este miércoles 16 de enero, procedimiento que se llevará a cabo después de que los encargados de la obra ejecutaran un protocolo que incluyó la realización de una serie de perforaciones hacia la casa de máquinas con el propósito de airear la bóveda.
El hallazgo de una cárcava entre los túneles de captación uno y dos durante dichas perforaciones, precipitó la decisión de cerrar la compuerta de captación dos como medida preventiva, a la vez que desató un plan de contingencia para evaluar, en primer término, las posibles consecuencias del hallazgo y, en segundo lugar, las posibles afectaciones que pueda generar el cierre de la compuerta de captación.
Frente al hallazgo de la cárcava, los conceptos técnicos presentados el pasado viernes ante el Consejo Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres y posteriormente al Puesto de Mando Unificado, que sesionó el domingo, manifestaron que no representa ningún riesgo para las personas ubicadas en la zona de influencia del proyecto.
“Estas cárcavas las encontramos con estas perforaciones, pero no quiere decir que son nuevas, puede que hayan estado ahí por mucho tiempo, por seis meses o por siete meses”, explicó el profesor Gabriel Fernández, miembro del equipo de expertos asesores de EPM para el proyecto Hidroituango.
Fernández añadió que se infiere que la socavación es de vieja data “porque alrededor de toda esa zona hay instrumentación, hay puntos de medida, hay un radar que mide los movimientos en la montaña, en el túnel vial hay puntos de medida dentro del talud, y ninguna de esa instrumentación ha mostrado que haya habido un cambio en los últimos cuatro meses”.
Frente a las posibles consecuencias del cierre de la compuerta, un reporte entregado por Hidroeléctrica Ituango S.A. a la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (Anla) muestra como posibles hechos sobrevinientes la generación de “vórtices en la zona de captación que podrían afectar la estabilidad de las rejillas y generar efecto cascada en los pozos de presión y hacer incontrolable el flujo de agua”; “oquedades o vacíos al interior del macizo con acumulación de agua y evidencia de presión; variaciones en los niveles de agua al interior de la casa de máquinas del proyecto; bajos niveles de agua en el embalse; probable reducción del caudal mínimo aguas abajo del embalse con incidencia directa en el sistema íctico; posible afectación ecológica por la disminución del caudal” y “probable afectación del suministro agua a las poblaciones por insuficiencia en las bocatomas”.
En consideración a tales escenarios, el Puesto de Mando Unificado determinó mantener el nivel de alerta “incrementando al máximo las medidas preventivas por parte del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo (Sngrd), teniendo como principal premisa salvaguardar todas y cada una de las vidas de los pobladores aguas abajo del proyecto”.
El riesgo de una variación en el caudal del río Cauca similar a la ocurrida en mayo pasado, que generó afectaciones en Puerto Valdivia y otras poblaciones ubicadas aguas abajo del proyecto hidroeléctrico, es lo que motiva el estado de prevención que el Gobierno Nacional ha declarado y por el cual ha emitido recomendaciones para los gobiernos departamentales y municipales, así como para EPM, “en el entendido de la prioridad máxima de proteger la vida de las comunidades”, según un comunicado divulgado tras el Puesto de Mando Unificado celebrado este domingo.
Según explicó el profesor Gabriel Fernández, tras la contingencia de mayo pasado se abrieron cuatro de las compuertas de captación de la casa de máquinas y un tiempo después se cerraron dos de manera súbita.
“Cuando hay un cierre súbito se produce una succión, el agua trae aire y tiende a desestabilizar el techo”, explicó el académico para añadir que la idea de las perforaciones es que ingrese aire a la casa de máquinas de modo que el nuevo cierre no genere desestabilización.
Ahora bien, la succión puede ocurrir por el hecho de que el agua seguirá circulando hacia afuera de la casa de máquinas pero a ella ya no estará ingresando el mismo caudal de antes, sino que este bajará a la mitad, hasta unos 380 metros cúbicos por segundo, según explicó la gerencia de EPM.
El agua que dejará de ingresar a la casa de máquinas llegará al embalse, que debe subir su nivel. En caso de que este nivel llegue a la cota 403, el agua volverá a evacuarse por el vertedero. Mientras esto ocurre es posible que el caudal del río disminuya, por lo cual es viable que se pueda cerrar en poco tiempo la segunda compuerta, para comenzar la recuperación de la casa de máquinas.
De otro lado, una creciente del caudal podría ocurrir si se genera un derrumbe dentro de la casa de máquinas, posibilidad descartada por el experto asesor de EPM debido a que “los volúmenes de roca que podrían estar afectados son limitados y en este momento la cresta de la presa está 28 metros por encima del embalse, entonces que pase el agua por encima (de la presa) es una eventualidad que no consideramos”.
Además de los planes de contingencia para salvaguardar la vida de las comunidades ribereñas, EPM incrementó la inspección de la instrumentación para detectar alguna variación en el macizo.
“Seguimos haciendo perforaciones para limitar y tener una idea de la geometría del cilindro que hay ahí adentro, se sigue activamente explorando, y estamos pensando, si pasa algo cuáles son las medidas correctivas que se deben implementar”, insistió el profesor Fernández.
“Este es un proceso dinámico porque en la medida en que hacemos más exploraciones conocemos más”, reiteró.
De otro lado, con motivo de la maniobra que se realizará este miércoles, EPM informó a la comunidad de esa zona del departamento una serie de novedades en relación con la movilidad, con el fin de proteger la vida de las personas.
En primer término, se estableció que los días miércoles 16 desde las 4:00 a.m., jueves 17 y viernes 18 de enero hasta las 6:00 a.m. se suspenderá temporalmente la movilidad a través de las caravanas terrestres que van desde y hacia el municipio de Ituango. Así mismo se suspenderá la movilidad fluvial el día miércoles 16, de 6:00 a.m. a 12 m.
De este modo, el transporte para los ciudadanos que se movilizan desde y hacia el municipio de Ituango será únicamente por vía fluvial durante los días y horarios en los que se suspenderá la movilidad terrestre.
El mismo miércoles 16 de enero, durante la operación de cierre de la compuerta, estará cerrada la vía hacia la Costa Atlántica en Puerto Valdivia para vehículos de más de 3.5 toneladas. Este cierre será de 6:00 a.m. a 12:00 m.