Como política de desarrollo urbano del actual alcalde de Medellín, ingeniero Federico Gutiérrez Zuluaga, se está implementando en esta ciudad el proyecto de establecer en la ciudad los llamados carriles solo bus.
Como política de desarrollo urbano del actual alcalde de Medellín, ingeniero Federico Gutiérrez Zuluaga, se está implementando en esta ciudad el proyecto de establecer en la ciudad los llamados carriles solo bus. Ojalá la propuesta del señor alcalde se ampliara con los carriles solo motos, que complementarían los carriles para bicicletas.
La retícula vial es el conjunto de vías, de diferentes categorías y funciones, que debe permitir la circulación desde y hacia todos los lugares de su área de influencia.
La retícula urbana está formada por todas las vías que cruzan la zona urbana, y que sirven tanto para la circulación de los vehículos como de los peatones. Son los canales por donde se opera la movilización urbana.
En el espacio podemos encontrar retículas viales que van subterráneas, otras a nivel de tierra, y vías elevadas.
Con relación al tiempo, tenemos retículas viales para altas velocidades, vías de circulación rápida, vías en donde la circulación es promedia, y vías de circulación lenta.
También podemos tener vías que de acuerdo con la función que cumplen, pueden tener carriles como el que estamos tratando solamente para buses. Esto aplicable más que todo a vías de doble calzada y de más de dos carriles.
Pero creo que ya estamos sintiendo el efecto negativo de la circulación negativa de las motos por los carriles vehiculares. Es el momento de canalizarlas a carriles solo motos localizados en el interior de las calzadas, rediseñando los carriles vehiculares.
El diseño de estas vías tiene que ser muy cuidadoso, porque implica que solamente pueden transitar por esos carriles los buses en forma ordenada y muy fluida y las motos. Para lo cual es muy importante que tengan una separación física de los otros carriles, con pequeñas barreras; además no permitir lo que se ha dado en llamar el bus arriero; y una buena y adecuada señalización de tránsito y demarcaciones y agentes de control.
Se deben programar y adecuar físicamente los paraderos de los buses, separados del carril de circulación, para garantizar un flujo ágil y permanente de los otros buses. Adicionar programas educativos para los conductores.
Lo más técnico es que los carriles solo bus y solo motos se ubiquen en las llamadas vías arterias, que al igual que los peatones, son las vías que recogen los mayores volúmenes de tránsito, para encauzarlos hacia otras vías de menor categoría. Son vías esencialmente urbanas, con la posibilidad de los más largos recorridos.
Estas vías arterias se considera que en Medellín son de dos calzadas y deben tener un mínimo de tres carriles para cada movimiento direccional, los interiores para flujo permanente, y los laterales para servicios.
El pasado nos interroga sobre la necesidad de implementar estas acciones oportunamente, acompañadas de buenos diseños, programas educativos para conductores y peatones, y los controles mínimos para su adecuada operación.