Otro de los artistas que se presentará en el L Festival, de música latina, en representación del país será J Balvin.
Con Alejandro Fernández y Juanes como reclamos relucientes de su cartel, el L Festival, un evento en el sur de California dedicado por completo a la música latina, inauguró su segunda edición con una noche en la que también actuaron artistas como Daddy Yankee o Luis Fonsi.
Tras debutar en 2015, el L Festival se celebra este año en Pico Rivera, una ciudad a unos veinte kilómetros al sureste de Los Ángeles, y acogerá este lunes su segunda y final jornada con los conciertos de músicos como Los Tigres del Norte, Marco Antonio Solís, J Balvin y Jesse & Joy.
Con un vídeo de un cohete despegando y con humo sobre las tablas aterrizó Juanes sobre el escenario del L Festival para ofrecer un recital muy convincente y atento a los matices de su exitosa fusión de pop-rock y ritmos latinos.
Juanes interpretó "Fuego" y "Hermosa ingrata", pertenecientes a su inminente disco "Mis planes son amarte", pero también dio un variado repaso a sus casi dos décadas de trayectoria musical.
"Nada valgo sin tu amor", que fue de las más coreadas por el público, y "Es por ti" mostraron su faceta más íntima y sentimental, aunque también hubo momentos para el baile y la fiesta con "Me enamora" o "La luz".
"Esta noche quiero hacer un homenaje muy sincero a uno de los más grandes de todos los tiempos", afirmó Juanes para presentar una aplaudida versión de "Querida" del fallecido ídolo mexicano Juan Gabriel, poco antes de cerrar su actuación por todo lo alto con "La camisa negra".
Entre tanto, lanzando besos a sus fans se presentó el mexicano Alejandro Fernández, que triunfó en el L Festival combinando su repertorio como intenso baladista con sus orígenes en la música ranchera. El artista conocido como "El Potrillo" se rodeó de una orquesta de lujo, con coristas y sección de vientos más propia de un elegante club de jazz que de un festival al aire libre.
En la tradición de los vocalistas latinos más populares, Alejandro Fernández abordó "Cóncavo y convexo", "Hoy tengo ganas de ti" o "Canta corazón".
En la segunda mitad se cambió el traje por la vestimenta charra y dio rienda suelta a las rancheras acompañado por un grupo de mariachi con el que cantó clásicos como "Guadalajara" o "México lindo y querido".
"¡Que viva México! ¡Que viva toda Latinoamérica! No están solos porque mientras otros están construyendo muros nosotros estamos destruyendo fronteras", dijo Fernández en referencia a las polémicas medidas contra los inmigrantes latinos patrocinadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Por su parte, Daddy Yankee avisó nada más comenzar que él no era un artista de muchas palabras, sino que había venido a Pico Rivera para "dar candela". Dicho y hecho, el puertorriqueño mostró sus credenciales de figura del reguetón con un espectáculo explosivo y demoledor impulsado por el incansable grupo de bailarines que le acompañaba.
Sonaron todos y cada uno de sus éxitos, como "Lo que pasó, pasó", "Ella me levantó" o "La despedida", y varias llamaradas surgieron del escenario cuando le llegó el turno a "Gasolina".
De la mano de "Despacito", una de las canciones más radiadas de la temporada y que causó auténtico furor en el L Festival, compareció el cantante puertorriqueño Luis Fonsi.
El artista ofreció una muestra de su versatilidad con canciones como "Corazón en la maleta" o "Aquí estoy yo". "Hoy estamos celebrando nuestro idioma, nuestra música, ahora más que nunca", afirmó Luis Fonsi en una nueva alusión a Trump.
Además de conciertos en sus dos escenarios más un área de DJ, el L Festival acogió otras actividades más allá de la música como una muestra dedicada a la obra de la pintora mexicana Frida Kahlo, una zona de artesanía y pintura de artistas locales, y una noria sobre la que se podía ver desde lo alto el recinto del evento.