La palabra intocable, que se aplica a quien forma parte del grupo social más bajo de la India, no necesita comillas ni letra cursiva
1. Verbos adecuados
Para expresar que algo procede de otra cosa, lo adecuado es emplear el verbo provenir y no devenir. DEVENIR significa ‘convertirse en algo’.
En los medios leemos: “La razón de su éxito deviene de la gestión por la que se rige”. “Explicó que su apodo deviene de la ocurrencia de un entrenador”.
El Diccionario de la lengua española (DLE) explica “devenir” con el significado de: ‘convertirse’ o ‘sobrevenir, suceder, acaecer’, pero ninguna de sus acepciones guarda relación con la de “provenir” que es: ‘nacer, originarse, proceder de un lugar, persona, cosa’.
En los ejemplos citados, lo correcto es utilizar: provenir, proceder o venir de.
Vea también: Sin conocimientos idiomáticos no hay corrección
2. Estructura sintáctica diferente
Además de las diferencias en su significado, señalamos que cada verbo tiene una estructura sintáctica diferente. Devenir se forma con un complemento sin preposición, o con la preposición en. Ejemplo: “El pensamiento económico devino EN ortodoxia”.
El verbo provenir se construye con la preposición DE, ejemplo: Una importante cantidad de fondos públicos provienen de los impuestos”.
3. Intocable. Paria
La palabra intocable, que se aplica a quien forma parte del grupo social más bajo de la India, no necesita comillas ni letra cursiva.
Leemos frases como: “Ocho muertos en la India por las protestas de los ‘intocables’”. “La frustración de los ‘intocables’ estalla en India con protestas y disturbios”.
El Diccionario de la lengua española (DLE) recoge la palabra intocable como adjetivo (‘que no se puede tocar’) y como sustantivo común en cuanto al género (el intocable - la intocable), en este caso, con el significado de:
“En la India, persona considerada impura, perteneciente a la más baja categoría social y cuyo contacto procuran evitar las demás castas”.
Como se trata de un uso aceptado y recogido en el Diccionario académico, no hay razón para destacarlo con comillas. En los ejemplos anteriores debió prescindirse de ellas.
Con este mismo sentido puede emplearse el vocablo paria, definido como: “habitante de la India, de ínfima condición social, fuera del sistema de las castas”. A veces, se utiliza con el sentido más amplio de: “persona excluida de las ventajas de que gozan las demás, e incluso de su trato, por ser considerada inferior”.
4. Bumerán o búmeran
Bumerán, búmeran, son lo adecuado y no: bumerang. Son las adaptaciones recomendadas de la voz inglesa boomerang.
La RAE desaconseja la grafía bumerang porque, como señala el Diccionario panhispánico de dudas, es una forma híbrida, que no es ni inglesa ni española.
Además, la hispanización de boomerang presenta dos acentuaciones válidas: en algunos países como Argentina, se prefiere la esdrújula búmeran; mientras que en España y en otras zonas de América predomina la palabra aguda: bumerán.
El plural de la forma esdrújula es invariable, los búmeran, mientras que el de la forma aguda sí cambia: los bumeranes.
La expresión: efecto bumerán (o búmeran), explicada en el DRAE con el significado de: ‘resultado de una acción que se vuelve contra su autor’, no necesita ser destacada en cursiva ni entrecomillada.
Ejemplos: “El efecto bumerán que puede producir el boicot a los productos”. “Una medida implantada en los años setenta para luchar contra la superpoblación con efecto búmeran”.
5. Flexiseguridad
El término flexiseguridad es un acrónimo válido, formado a partir de: flexibilidad y seguridad. Con él se hace referencia a un tipo de política laboral que pretende combinar la flexibilidad en contratos y despidos, con la seguridad o protección durante el tiempo de desempleo.
El acrónimo flexiseguridad alude, además, a un tipo de “mercado laboral sin restricciones para el contrato o el despido, pero con elevada protección de desempleo y políticas activas para la formación continua”.
Es un modelo que tiene su origen en Dinamarca, a principios de los años ochenta, y que ha sido adaptado posteriormente a países como Holanda, Austria o Alemania.
Dice la RAE: Se ve en ocasiones, la variante flexiguridad, que, sin ser incorrecta, es menos recomendable que flexiseguridad, pues esta resulta más transparente en su significado y tiene mayor uso.
6. Masa de aire cálido
La RAE recomienda hablar de masa de aire cálido o masa cálida y no, de masa de calor, para nombrar un volumen de aire más caliente que su entorno.
En la información meteorológica se escucha: “La masa de calor afectará a todo el país”.
Masa de calor puede ser un cruce indebido de la expresión “masa de aire cálido” con “ola de calor”, uno de sus posibles efectos y que alude a una subida notable de las temperaturas; en el ejemplo anterior habría sido más correcto decir: masa de aire cálido. También, lo adecuado es decir: masa de aire frío (o polar) o masa fría, y no: masa de frío.