A sólo 100 kilómetros de la gloria

29 septiembre de 2018 - 04:16 PM

El no darse por vencido y luchar hasta el final por los sueño es la lección que hoy deja el ciclista antioqueño Álex Cano, quien después de muchos intentos consiguió vestirse de amarillo en una de las grandes carreras del país y hoy sólo espera que pasen los últimos 100 kilómetros para ser el nuevo campeón del Duelo de Titanes.

Sólo 100 kilómetros separan al corredor antioqueño Álex Cano de conseguir su más anhelado sueño. El líder del Coldeportes-Zenú-Sello Rojo está a horas de convertirse en el nuevo campeón del Clásico RCN y cumplir, después de varios intentos, el sueño de obtener el título de una de las grandes carreras del calendario nacional.

Han sido años de dedicación, esfuerzo, de darlo todo en las carreteras en busca de su objetivo, pero este seguía esquivo, pues aunque conseguía terminar en el podio general final no lo hacía ocupando el primer cajón, sino uno de los dos de más abajo.

Esa racha terminó y este domingo, cuando se cumpla la décima y última etapa de la edición 58 del también llamado Duelo de Titanes, Álex Cano subirá a lo más alto del podio a recoger el trofeo de campeón, un título muy merecido, no sólo por su constancia y lucha por lograrlo sino también por el ser humano que se esconde detrás del uniforme, que lo ha llevado a convertirse en uno de los corredores más queridos por el pelotón nacional, los medios y todos los aficionados del deporte de las bielas.

Tres días de amarillo

Aunque muchas veces lo buscó, el corredor de 35 años nunca se había vestido de líder en una de las grandes carreras de Colombia, luego de sumar tres días vestido de amarillo confesó, entre lágrimas, en diálogo con EL MUNDO, que “me da mucho orgullo el cariño de todos. No hubo un solo corredor del pelotón ni un solo integrante de la caravana que no me felicitara, que no me diera un abrazo o un apretón de manos, que no me hiciera un gesto, sé que de todos fue algo muy sincero y eso es realmente lo más maravilloso de portar esta camiseta, que ha sido algo verdaderamente muy especial para mí”.

Otra de las cosas que llenó a este ciclista de motivación para mantener el liderato fue el hecho de que la carrera tuviera sus últimas etapas en territorio antioqueño, a donde llegó vestido de líder: “Llegar a la casa es una motivación enorme, mentalmente eso es un plus adicional y más vestido de líder, así lo sentí en la carretera. Hubo un momento donde tuve una pequeña crisis, donde no me sentía muy bien, pero decidí arriesgarme y lo demás fue la motivación y la energía de la gente, la camiseta de líder que también da buenas sensaciones y principalmente el llegar a esta bella tierra antioqueña es impresionante, es difícil describir lo que un deportista siente cuando pasa entre tanta gente que te grita, que te da ánimo. Eso es lo especial del ciclismo, que el aficionado es parte de la carrera”.

Entregando todo hasta el final

Además del liderato y el título que se adjudicará este domingo, Álex cumplió otro objetivo, pues nunca había corrido una carrera que tuviera los míticos y exigentes ascensos a la misma vez y sólo le faltaba adjudicarse el Alto de Letras: “Correr todos en una misma carrera nunca me había tocado, he ganado todos los puertos míticos de Colombia y sólo me faltaba Letras, en la séptima etapa lo logré y fue una satisfacción muy grande haberlo hecho. Es un honor ahora decir que ya he coronado primero en esas grandes escaladas, siempre me he caracterizado por ser un buen escalador y eso llena de orgullo”.

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A falta de una sola jornada, que se disputará este domingo con un circuito de 100 kilómetros (28 vueltas) en la ciudad de Medellín, el nacido en el municipio de Yarumal opinó que por su mente sólo pasa “el seguir disfrutando el día a día, el kilómetro a kilómetro, el mañana. Afrontar esta etapa con mucha concentración, porque se dice que las carreras no se ganan ni se pierden hasta la última raya y esa es la realidad. Hay que ser muy prudentes, porque hay caídas, percances mecánicos, enfermedades, que son alicientes en las carreras de ciclismo, sólo pienso en seguir concentrado, la diferencia que tengo me da un poco de respiro, pero hay que correr con toda hasta el final”.

"Para mí será un orgullo vestir esta camiseta en la última etapa en el circuito en Medellín, la tierra que me vio hacerme y crecer como ciclista y como persona, donde habrá seguramente muchos amgos y mucha gente que siempre ha soñado verme con esta camiseta y será un honor poder cumplirles", fueron las palabras del corredor terminada la penúltima etapa.

Castañeda también celebró con "Orgullo"

Después de varios intentos, el corredor antioqueño Jaime Castañeda, del equipo Orgullo Paisa, se adjudicó una victoria en el Clásico RCN, la cuarta en la cuenta de su equipo y la cuarta también en su cuenta personal en sus participaciones en el Duelo de Titanes.

El popular Bananero, como es conocido en la caravana ciclística, hizo gala de sus habilidades al sprint y en el embalaje final de la novena etapa, disputada este sábado entre el corregimiento de San Félix y el municipio de Bello sobre 119,7 kilómetros, se impuso ante otros dos experimentados como el boyacense Diego Ochoa (EPM) y José Serpa (GW-Shimano), segundo y tercero respectivamente.

Una victoria más para el equipo antioqueño, que en esta carrera ha sido gran protagonista.

"Las fuerzas me alcanzaron para disputar un embalaje perfecto para poder ganar. Ha sido un Clásico excepcional, las victorias del equipo nos han motivado mucho y han aportado para que los resultados sean buenos. En la Vuelta a Colombia el equipo sufrió con medio equipo enfermo, sufrimos mucho, pero la bendición de Dios nos ha acompañado en este Clásico y por eso hemos podido conseguir lo que hemos logrado hasta ahora", afirmó Jaime all final de la etapa.