Autoridades ven con preocupación el aumento de las hostilidades entre estos grupos, que tienen una alta influencia en Chocó y están generando el desplazamiento de cientos de personas.
El Eln y el Clan del Golfo volvieron intensificar los combates que han venido teniendo en los últimos dos años en el Chocó, lo cual generó un desplazamiento masivo en Riosucio. Allí, en las últimas horas, 40 indígenas tuvieron que dejar su hogar para evitar el fuego cruzado de dos grupos ilegales que luchan por el control territorial.
José Ángel Palomeque, secretario de Paz, Reconciliación y Posconflicto de este municipio, expresó que las personas no realizan actividades agropecuarias debido a que tienen temor de ser víctimas de minas antipersonal.
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Palomeque indicó que las personas desplazadas son atendidas en el casco urbano y son alimentadas por una agencia de Naciones Unidas.
Según los reportes de las autoridades de Riosucio, 350 familias indígenas tuvieron que dejar su vivienda, principalmente quienes tenían su vivienda cerca a la cuenca del río Truandó y Loma de Quiparadó, por supuestamente ser informantes de alguno de los grupos armados.
La Defensoría del Pueblo viene denunciado este fenómeno, sobre el cual aseguran que han padecido 15 mil personas.