Aunque durante varios días Devimed, que se encuentra a cargo de la Autopista Medellín-Bogotá, ha anunciado por medios digitales que “la vía ya se encuentra despejada en sentido de descenso (Bogotá-Medellín)” y que se “espera el visto bueno de las autoridades para que se habilite el paso vehicular en la zona”, el corredor sigue cerrado.
Desde este concesionario dijeron que la decisión se encuentra en manos del alcalde de Copacabana, Óscar Alberto Restrepo Restrepo. Sin embargo, el mandatario le comentó a EL MUNDO que la apertura corre por cuenta de Devimed y la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).
Restrepo Restrepo narró que pese a los anuncios de Devimed, el jueves estuvo con el contralor de Antioquia en la zona del derrumbe que taponó el paso y constató que “la vía se encontraba completamente taponada y estaban cayendo unas rocas tenaces”.
Aclaró que en su rol de coordinador del Puesto de Mando Unificado (PMU) y en su calidad de alcalde tiene la tarea de “aportar cuando tengo que hacerlo, para decir que las condiciones de la vía, por sentido común, no se puede abrir, yo hago ese aporte” porque hay rocas que representan riesgo.
No obstante, “Invías y la ANI tienen el rol de que ellos son los dueños de la vía y ellos tienen la obligación de abrirla, despejarla y entregarla”, anotó.
“Yo lo que digo es que la ANI dé las garantías para que puedan abrir la vía cuando tengan las condiciones de seguridad para que la puedan abrir”.

Desde la ANI
El ingeniero Daniel Tenjo, de Proyectos Carreteras de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), señaló ayer que el radar que el concesionario Devimed ha empleado para detectar los movimientos del talud “estaba en alerta naranja, lo cual nos permitía que se autorizara el tráfico de vehículos pero cuando transitaron los primeros vehículos del concesionario para una prueba el radar pasó de nuevo a alerta roja”.
Por esto se detectaron los sitios donde se han generado estos movimientos, que se intervinieron ayer para realizar una nueva medición e identificar si en horas de la tarde se podía dar apertura a un carril en el sentido Bogotá-Medellín.
“Lo primordial es la tranquilidad y la seguridad de los usuarios y hasta el momento en que esas condiciones no estén aseguradas no se permitirá el tráfico”, aclaró Tenjo.

¿Cómo van las labores?
Devimed informó que ayer se retiraron de la zona más de 6.000 metros cúbicos de material, llegando casi a los 58.000 metros cúbicos durante las labores.
“Seguimos trabajando con las catorce retroexcavadoras, cuatro tienen martillo para romper la piedra. Tenemos tres bulldozer y 160 volquetas”, contó Germán Vélez, gerente de Devimed.
“Seguimos comprometidos con abrir la vía lo antes posible. El día de hoy (ayer) básicamente trabajamos descargando las piedras de la zona central, que son las que han impedido que la vía se abra estos tres días que estuvo despejado el carril pero la peña que había en el centro generaba una caída grande de rocas”, añadió.