En veinte años la situación de Colombia puede ser catastrófica, todo causado por una formación educativa que es muy deficiente.
Se calcula que en veinte años la situación de Colombia puede ser catastrófica, todo causado por una formación educativa que es muy deficiente, lo que se está demostrando en la actualidad cuando altos políticos y directivos empresariales se mueven en un pésimo nivel alejado de un comportamiento ético de buena altura.
La única solución que hoy se le puede dar para el caos al que nos acercamos es que desde el día de hoy hagamos colosales aportes para mejorar el nivel educativo, lo que solo se lograría si todos los medios de comunicación se convierten en ‘educadores’. Sería maravilloso si la televisión se convirtiera en una maestra inteligente y entretenida y muy educadora. Debería ser obligatorio para los colombianos más inteligentes e instruidos, y que se conviertan en profesores por la televisión para que en forma ingeniosa y divertida eduquen a toda nuestra población, naturalmente la prensa y la radio también aporten grandes esfuerzos para que toda la población se encamine por un sendero correcto, convirtiéndose en un personal honesto que dirija a toda Colombia.
En el mundo en que hoy vivimos se demuestra claramente que el actual sistema educativo es deficiente y que no tiene la fuerza de empuje colectivo para que tengamos un país próspero y guiado por principios éticos, así como se han dado en la historia de la humanidad cambios dramáticos que han reorientado a toda la población como fue por ejemplo la Revolución Francesa, el nacimiento del Cristianismo, la colonización americana y su independencia de Europa.
Los cambios que hoy requiere nuestro país para tener un buen futuro deben ser impuestos con un ordenamiento que obligue con fuerza y sin evasiones para que los ciudadanos capacitados tengan la ‘obligación’ de ser profesores produciendo una nueva generación que oriente a toda la población a un comportamiento ético que incluya el compartir los bienes de toda la sociedad en forma hermanada, lo que también nos llevaría a una sociedad próspera, alegre e incluyente.
Conozco muchas personas correctas y de colosal inteligencia que podrían ser los maestros que cambien a toda la población futura pero la realidad es que se está repartiendo en la actualidad una educación aburrida y deficiente en principios éticos.