Carril Preferencial, Renovación y cambio de imagen, paraderos inteligentes, recaudación electrónica y control y gestión de flota son los componentes de la política de transporte público en los que trabaja la Alcaldía de Medellín, con la Secretaría de Movilidad, para lograr una movilidad sostenible y que los ciudadanos prefieran utilizar el transporte público.
Uno de los grandes retos que tiene la ciudad de Medellín es el de la movilidad. Cada día es más el crecimiento del parque automotor de la capital antioqueña, pues día a día son más los carros particulares y las motos que salen de los concesionarios y las congestiones vehiculares que se ven en las calles.
El gran objetivo de la administración, encabezada por el alcalde Federico Gutiérrez, y apoyada por la Secretaría de Movilidad, ha sido el de tener en la ciudad una movilidad sostenible, que mejore la calidad de vida de la ciudadanía y que lleve a la misma a dejar en casa los vehículos particulares y a preferir usar el transporte público.
Para llegar a ese objetivo, se han implementado varias estrategias que lleven a cumplir con el proyecto de política de transporte público de Medellín, la cual está basada en cinco componentes en los que se trabaja actualmente para poder llegar a la meta propuesta.
Carril preferencial, recaudo electrónico, renovación de buses a tecnologías más limpias y cambio de imagen, paraderos inteligentes y control y gestión de flota (monitoreo de buses) son los cinco pilares en los que se basa el proyecto de transporte público de Medellín y en los que la Secretaría de Movilidad enfoca su trabajo para conseguir un transporte más moderno, que mejore la movilidad de la ciudad y la calidad de vida de la población.
Humberto Iglesias, secretario de Movilidad de Medellín, estuvo en diálogo con EL MUNDO y explicó en qué va cada uno de los componentes de la política de transporte público y qué se pretende con cada uno de ellos, pues es un convencido de que la solución para el alto flujo de vehículos circulando en las calles no es crear más vías ya que si se “construyen más vías se atraen más vehículos, se incentiva a que se compren más vehículos, la mejor solución es modernizar el transporte público”.
Para el Secretario, “el transporte público es uno de los grandes estandartes que tiene esta administración, por su puesto queremos tener un sistema de transporte público tan ágil, eficiente, moderno y seguro que las personas decidan bajarse de su vehículo particular y poderse montar al sistema de transporte público al encontrar una muy buena opción”, además destacó que “para poder modernizar este transporte público y llevarlo a un nivel diferente tenemos varias estrategias que hemos venido implementando. Son cinco componentes que, sin lugar a dudas, generarán un transporte público moderno y mejorarán la calidad de vida de los ciudadanos”.
Además a estos cinco pilares se suma el sistema metro, que mueve más de un millón de pasajeros diarios, que tiene el metroplús, el tranvía y el metrocable, este tiene en construcción dos nuevas líneas, la de Miraflores, que empieza a funcionar en febrero, y la de El Picacho, que se espera sea inaugurado a finales de este año. Igualmente la ciudad contará con 64 buses eléctricos y el sistema Encicla, que también es otro de los grandes pilares de la movilidad sostenible, tendrá el doble número de bicicletas y de estaciones disponibles para los usuarios.
Así explicó el Secretario de Movilidad en qué está cada uno de los componentes:
1. Renovación de flota y cambio de imagen:
“Queremos tener unos buses modernos, que tengan una imagen garantizada para el usuario y que puedan tener un confort diferente. Llevamos un 32% de renovación de la flota de nuestra ciudad y sin lugar a dudas ya se empieza a ver en Medellín esos buses con una nueva imagen que generan un bienestar para el usuario. Además, un componente fundamental es el de accesibilidad, sobre todo para las personas con movilidad reducida, que puedan tener la oportunidad de ir en los buses de nuestra ciudad, que estos tengan una plataforma que permitan que cualquier usuario de transporte público se pueda estar movilizando en él”.
2. Recaudo electrónico:
“Es increíble que en una ciudad como Medellín todavía la persona que lleva a su cargo la vida de 40 o 50 pasajeros sea la misma que está recibiendo el pago del pasaje, la misma que está buscando las monedas para devolver, la que va conduciendo y muchas veces la misma que va chateando o hablando por celular. Por el tema de seguridad vial vamos a avanzar en que el recaudo sea electrónico, a través de la tarjeta de ciudad que es la tarjeta Cívica y que esto genere no sólo seguridad vial sino también integración física y tarifaria con todo el sistema metro. Llevamos más de 1.600 buses que actualmente tienen este sistema de recaudo electrónico”.
3. Carril preferencial:
“Esta es una gran apuesta que tiene la administración por privilegiar el transporte público, por mejorar los tiempos de desplazamiento. Este carril en todos los corredores donde se ha instalado ha mejorado el tiempo de desplazamiento de los buses. ¿Por qué queremos mejorar el tiempo de desplazamiento de este tipo de servicio?, porque van 40 o 50 pasajeros en cada bus, mientras que en un vehículo particular pueden ir entre cuatro y cinco personas, por eso queremos privilegiar donde van la mayoría para que tengan un tiempo de desplazamiento mejor y ya se ha logrado mejorarlos en todos los sectores en un 11%, que no sólo está contribuyendo con las mejoras en los tiempos de desplazamiento sino también con algo que para esta administración también es fundamental y es la seguridad vial, pues en todos los sectores donde se ha instalado el carril preferencial se han logrado disminuir los incidentes con lesionados y los incidentes con mortalidad. Hay una acción judicial ante el carril preferencial que respetamos, la apelamos y estamos a la espera de la decisión final”.
4. Paraderos inteligentes:
“Vamos a instalar 383 paraderos en Medellín, esos paraderos dejan de ser templos de la publicidad y se convertirán en paraderos que permitan que los usuarios puedan tomar decisiones con respeto al transporte público. Tendrán unos mapas que dirán los orígenes y destinos de las rutas que pasan por esos sectores y muchos de esos paraderos dirán cuánto falta para que llegue el próximo bus. Ya hay 80 paraderos de esta categoría instalados y la idea es que de aquí a marzo de este año estén instalados 383 paraderos de esta tipología”.
5. Gestión y control de flota:
“Esto es que cada uno de los buses de nuestra ciudad tenga un dispositivo, una especie de GPS, en cada bus, que diga a qué velocidad van, si están prestando un buen servicio, si están recorriendo a la frecuencia que tienen que recorrer los trayectos, si están parando en los paraderos autorizados o no o si se están desviando de las rutas. Casi el 90% de los buses de la ciudad tiene este dispositivo”.
Uno de los sectores que ya funciona 100% con los pilares que componen la política de transporte público que se quiere lograr en toda la ciudad es Belén, comuna que corresponde a la Cuenca 3 y que es operada por la empresa Masivo de Occidente.
EL MUNDO estuvo visitando las instalaciones de esta empresa y pudo comprobar que cada uno de sus buses cumple con los pilares que mencionó anteriormente el Secretario de Movilidad.
La Cuenca 3, Belén, está muy comprometida con prestar un buen servicio y ayudar a mejorar el transporte público de la ciudad. Foto: María Fernanda Múnera.
Darío Montoya Echeverri, gerente de Nuevos Negocios de Masivo de Occidente, manifestó que “la experiencia ha sido muy enriquecedora y muy dura en algunos aspectos, porque es un cambio muy fuerte de la manera de uno hacer las cosas. Estamos enseñados en el transporte público a ser muy individualistas, a que tengo mis carros y compito para conseguir el mejor conductor y la mayor cantidad de usuarios, y la prestación del servicio pasa a un segundo plano, aquí hacemos un manejo más integral y así podemos tener control de más cosas, por lo que termina siendo un transporte de más calidad, aportándole a la ciudad más seguridad y aportándole en la parte ambiental, de comodidad y de calidad del servicio”.
El gerente destacó que “para nosotros como transportadores es un cambio muy duro, porque veníamos con otros conocimientos y ahora hay que aprender cosas nuevas. La parte económica también cambió porque ya no se recibe diariamente el ingreso, pero no nos podemos quejar. Es un cambio importante y nos mantiene muy motivados el ver como se mejora la movilidad en las zonas, donde la gente se ve satisfecha, los niños y adultos mayores usan nuestro transporte con tranquilidad. Todavía hay muchas cosas por mejorar, pero sin duda es un transporte de mucha más calidad”.